Cinemanía > Películas > La saga Crepúsculo: Eclipse > Comentario
Destacado: Kingsley Ben-Adir es el protagonista de 'Bob Marley: One love'
La saga Crepúsculo: Eclipse cartel reducidoLa saga Crepúsculo: Eclipse(The Twilight Saga: Eclipse)
Dirigida por David Slade
¿Qué te parece la película?

Con nuevas dosis de la acción, el amor, la amistad, los celos y la pasión que convirtieron Crepúsculo y La Saga Crepúsculo: Luna Nueva en grandes éxitos de taquilla a nivel mundial, La Saga Crepúsculo: Eclipse es la continuación, cargada de romance y venganza, de esta historia de vampiros de popularidad internacional. A partir de la serie de 'bestsellers' de Stephenie Meyer, las novelas y las películas se han convertido en un fenómeno cultural en toda regla con una comunidad de fans entregados que espera ansiosa cada nueva entrega.

En menos de cinco años, Stephenie Meyer se ha convertido en un fenómeno editorial en todo el mundo. Los derechos de traducción de las cuatro novelas de la Saga Crepúsculo se han vendido en casi 50 países, y entre ellas suman ya 100 millones de ejemplares vendidos en todo el mundo. Sus libros llevan ya más de 142 semanas en las listas de los más vendidos... y las que les quedan.

La Saga Crepúsculo: Eclipse está dirigida por David Slade (30 días de oscuridad, Hard Candy) a partir de un guión de Melissa Rosenberg, basado en la novela Eclipse, de Stephenie Meyer. Kristen Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner protagonizan la cinta.


El fenómeno continúa
La serie de películas de La Saga Crepúsculo, protagonizada por Kristen Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner, cuenta la historia de la joven de 17 años Bella Swan, que se muda al pequeño pueblo de Forks, en el estado de Washington, para vivir con su padre, y no puede evitar sentirse atraída por Edward Cullen, un pálido y misterioso compañero de clase que parece empeñado en guardar las distancias. Pero ninguno puede negar la atracción que los empuja el uno hacia el otro... ni siquiera cuando Edward le confía que su familia y él son vampiros. Por si eso no fuera suficiente, resulta que el mejor amigo de Bella, Jacob Black, es un hombre lobo, creado con un único propósito: matar vampiros.

CREPÚSCULO, la historia de amor moderna de vampiros llena de acción que fue la primera entrega de la serie, se estrenó en cines el 5 de diciembre de 2008, con gran éxito de taquilla. La segunda película de la franquicia cinematográfica, LA SAGA CREPÚSCULO: LUNA NUEVA, se estrenó el 18 de noviembre de 2009. La franquicia lleva recaudados más de 1.100 millones de dólares en la taquilla mundial hasta la fecha.

Al igual que en la novela, en la película, el triángulo amoroso entre Bella Swan, Edward Cullen y Jacob Black llega a un momento crucial; mientras que los Cullen y la manada de lobos deben unirse frente a un enemigo común. "Cuando empezamos a hacer estas películas, mucha gente decía que la tercera iba a ser la mejor película", comenta Wyck Godfrey, uno de los productores de los tres filmes. "Creo que mucha gente opina así porque Eclipse es la que tiene más acción, con un clímax en el que hay una gran batalla entre lobos y vampiros y neófitos. Además, sabes que la relación Bella/Edward/Jacob va a alcanzar un punto crítico en Eclipse".

"Pero, para mí, Eclipse trata realmente sobre Bella y su decisión de convertirse definitivamente en vampiro, entonces empieza a valorar verdaderamente lo que eso comporta", agrega Godfrey. "Debe sopesar los pros y los contras de las ramificaciones de elegir convertirse en la eterna amante de Edward".

La autora Stephenie Meyer concuerda: "Para mí, el tema principal siempre fue tener que afrontar las consecuencias de las decisiones que tomas, e incluso las elecciones correctas tienen consecuencias, y no tomar una decisión tiene una consecuencia. Uno de los aspectos más importantes de madurar es que los adultos se dan cuenta de que si haces A, tendrás que afrontar B, y tienen eso en cuenta. Bella tiene que convertirse en una adulta y empezar a afrontar las consecuencias de sus actos".

Las complicadas relaciones entre el gran número de personajes se intensifican en su historia. "Los celos y la confianza intervienen en toda relación humana. Es algo que me resulta interesante de explorar y, cuando escribo, me doy cuenta de que me implico mucho en las complejidades de las relaciones humanas y eso es lo que siempre me anima a volver", comenta Meyer. "Hay muchísima historia con Victoria, Riley y Bree que no estaba en el libro. Mientras trabajábamos en el guión de Eclipse, tuve que reunirme con Melissa y unas cuantas personas de Summit, y explicarles con pelos y señales qué estaba haciendo exactamente Victoria, para que pudiéramos darle sentido a todo. Fue muy divertido, porque hay mucho de esa historia que nadie conoce, ya que no figura en la novela. Así que disfruté con eso y me alegro de que parte de ello figure en la película, para que la gente pueda ver algo de ese trasfondo que estaba sucediendo del que Bella no era consciente".

"Dependo muchísimo de Stephenie, cada vez más con cada nueva película, y en Eclipse más que en las dos anteriores", confirma la guionista Melissa Rosenberg. "En Eclipse, fuimos más allá del libro y profundizamos en la mitología que Stephenie ya había ideado. Compartió parte de la misma conmigo, lo que me permitió dar más cuerpo a la película y ofrecer unos puntos de vista diferentes sobre algunos de los restantes personajes".

El misterioso personaje nuevo de Riley destaca bastante en la película. "Como los libros están todos escritos desde la perspectiva de Bella, no conoces a Riley hasta que ella conoce a Riley. Pero Stephenie había pensado, naturalmente, cómo había llegado a ser Riley como es, así que tuve oportunidad de dar más cuerpo a su personaje, de modo que no lo metemos directamente en el tercer acto", desvela Rosenberg.

"Eclipse fue la más difícil de escribir de las tres", agrega Rosenberg. "Pensé que sería la más sencilla, porque está llena de acción. Sin embargo, cuando me puse en serio a escribirla, me di cuenta de que la acción está concentrada fundamentalmente en el tercer acto. Así que había que repartir parte de la acción y la tensión por el resto de la película. Por eso acabó siendo realmente el guión más complicado de los tres, y seguramente sea mi preferido".

Siguiendo los pasos de Catherine Hardwicke y Chris Weitz, se eligió al director David Slade para dirigir la filmación de la tercera entrega llena de acción de La Saga Crepúsculo.

"Siempre quisimos darle variedad al estilo de cada una de las películas, por lo que siempre pensamos que contaríamos con un director distinto para cada una", explica Godfrey. "Para Eclipse, queríamos alguien que mostrara una capacidad para trabajar con jóvenes actores y sacarles buenas interpretaciones, pero también alguien que tuviera un estilo visual más grandioso, con mayores miras y la capacidad de rodar excelentes escenas de acción. David Slade surgió como un fantástico candidato. Además, era alguien a quien le encantan los mitos y lo sobrenatural. Su película Hard Candy dependía completamente de las interpretaciones, mientras que su segunda cinta, 30 días de oscuridad, mostraba ese preciso estilo visual. Vino y nos presentó su visión de la película y nos dimos cuenta de que podía darnos lo que buscábamos, sobre todo con la acción que queríamos para las escenas culminantes del filme".

"Lo que me atrajo de este proyecto fue que era una gran historia y un tremendo desafío para mí como realizador. No me gusta hacer lo mismo una y otra vez, porque aprendo a base de enfrentarme a retos. En cierto aspecto, éste era el mayor desafío que había, hacer una película de este calibre, en esta cantidad de tiempo y meterme básicamente en otro género. Sí, he hecho una película de vampiros, pero Eclipse es algo muy distinto. Se trata de una historia romántica, que alterna entre sentimientos más oscuros y abyectos y escenas puramente románticas. Hacer escenas muy emotivas suponía un enorme reto, además de ser divertido y una manera de madurar como director. Pero, lo que es más importante, siempre busco buenas historias y, ahora, tras haber leído todos los libros, Eclipse es mi historia favorita. Así que creo que tenemos la suerte de contar con la mejor historia y a los directores nos gustan las buenas historias, porque así sabemos que la mayor parte de nuestro trabajo ya está hecho", comenta riendo Slade.

"Eclipse es una de las historias más amplias. Creo que Luna Nueva era muy sofisticada en su desarrollo de las relaciones entre los tres personajes", comenta Slade. "Pero lo que yo quería hacer con Eclipse, porque tenía historias de escala muy superior, era adoptar un enfoque más cinematográfico para la película. Eclipse rebosa historia y está llena de momentos épicos. Es un libro muy grueso. Así que creía que esta película en concreto tenía que tener un tono muy cinematográfico".

Slade colaboró estrechamente con el equipo creativo – productor, guionista, autora, actores – con el que ya contaba la serie. "David es un auténtico artista, con un sentido del humor muy particular y mordaz, con el que conecto perfectamente", comenta Godfrey. "Aborda cada escena con una idea visual de lo que quiere conseguir y puede describir y presentar su visión con suma claridad".

"Si tengo intención de rodar de cierta manera es importante, siempre que sea posible, incluirlo en el guión. Yo enseñaba mis 'storyboards' a Melissa y ella incorporaba dichos 'storyboards' al texto escrito", explica Slade. "A veces hablábamos sobre los personajes y detalles concretos sobre ideas y antecedentes. Melissa posee una tremenda comprensión de la historia y los personajes, y es muy inteligente y rápida, captaba las ideas realmente rápido cuando yo intentaba describir algo estéticamente. Luego hablábamos por teléfono con Stephenie Meyer, le comentábamos nuestras ideas y ella siempre tenía algo interesante que aportar. Melissa fue una excelente compañera para desarrollar ideas que nos permitieran contar esta épica historia. Cuando recibíamos la aprobación de Stephenie, nos sentíamos como si hubiera dicho la última palabra sobre el tema, ya que éste es su universo".

"Cada película ha sido algo distinta en el proceso de escritura del guión", admite Meyer. "Con Crepúsculo, llegué a ver el guión cuando ya faltaba bastante poco para el borrador definitivo y realicé unas cuantas anotaciones. Nada realmente en profundidad, porque me preocupaba meterme en terreno de otros, así que elegí únicamente las cosas que me parecieron realmente importantes. En la primera, era como una especie de fiesta de chicas, entre Catherine, Melissa y yo, y era genial tener a todas esas mujeres juntas".

Meyer agrega: "Con Luna Nueva, fue genial porque Chris es director y guionista. Entendía mi papel y yo entendía el suyo. Se portó muy bien preguntando: '¿Qué opinas tú?' En una escena en concreto, sé que simplemente dijo: 'Hagámoslo tal como sale en el libro'. Como escritor, te encanta oír eso".

"Con Eclipse, era un continuo intercambio de opiniones, incluso una vez empezado el rodaje. Es un libro muy largo, en el que suceden muchas cosas. Creo que no dejamos de meter cosas para luego quitarlas... fue complicado. Así que Melissa y yo trabajamos mucho en eso. Leyó un relato corto en el que yo estaba trabajando y fue capaz de incorporar parte de eso. Melissa y yo trabajamos muy bien juntas, repasando toda la información, a lo largo de muchas noches y cenas. ¡Fue divertido! Melissa es genial y es como una especie de fiesta de pijamas siempre que estoy con ella".

"Cada experiencia ha sido muy distinta, con cada director ha habido una sensación totalmente distinta. David es genial y hemos congeniado mucho con el tema de la música. Tendemos a escuchar las mismas cosas y ha dirigido algunos de los vídeos musicales de mis grupos favoritos", desvela Meyer. "Teníamos una buena conexión a ese nivel y creo que sus sensibilidades en los vídeos y ese sentido del movimiento le han venido muy bien para Eclipse. Durante el rodaje, es sumamente amable y alegre. Creo que resulta muy divertido trabajar con él".

Las estrellas que regresaban a la serie se muestran de acuerdo con ella. "Creo que es genial que los actores tengamos la oportunidad de trabajar en la misma historia, con los mismos actores, pero con un director distinto, y ser capaces de adaptarnos a sus diferentes estilos. Es genial para nosotros. Agradezco mucho haber tenido esa oportunidad", afirma Taylor Lautner. "Creo que esta película va a ser definitivamente más oscura. Estamos en guerra y Victoria busca venganza. Ahora, los hombres lobo y los vampiros están completamente implicados. Y no hay mejor elección para todo eso que David Slade".

"Tiene mucha más acción", agrega Pattinson. "Luna Nueva es una película muy interna y se mueve a un ritmo muy distinto. Eclipse es mucho más frenética y necesita haber más inmediatez en todo, algo que le gusta a David. Además, creo que el tono es mucho más duro. Aquí las escenas de lucha son mucho más feroces y salvajes. Incluso cuando los personajes hablan entre sí, todo parece ser mucho más inmediato. Creo que a la gente le va a sorprender bastante el ritmo más rápido".

"Curiosamente, creo que ha sido la más sencilla de las tres. No nos ha costado nada volver a coger el ritmo. Sobre todo después de Luna Nueva, que era una experiencia tan cerebral en lo referente a todo por lo que Bella tuvo que pasar. Bella es mucho más diligente en esta película, tiene mucho más que hacer. Se le exige que haga frente a asuntos que no tienen por qué ser emocionalmente agotadores. Ya he pasado por una aterradora situación de vida o muerte un millón de veces, creo que esta vez puede llevarlo un poco mejor", comenta entre risas Stewart.

"Eclipse fue mi libro favorito y al público le va a encantar la película, porque todavía tenemos un componente romántico muy importante, con Bella, Edward y Jacob", comenta Lautner. "Pero también estamos en guerra, así que el nivel de acción está por las nubes. David Slade le ha aportado un tono más oscuro y guay. Podría ser mi favorita de la saga... hasta ahora".

"Stephenie ha estado presente en esta ocasión mucho más que en las anteriores. La verdad es que no intimida mucho directamente, pero simplemente con saber que está ahí, mirando el monitor, puede intimidar bastante. Pero, en muchos aspectos, resulta útil, sobre todo si quieres ganar una discusión con alguien. 'Stephenie, ¿puedes decir que es así como pasó en el libro?' Eso puede resultar muy práctico", comenta Pattinson riendo.

Godfrey agrega: "Stephenie ha tenido más oportunidad de venir en Eclipse, ya que no tenía que promocionar ningún libro en ese momento. De hecho, mientras está de visita, vive en mi caravana", comenta entre risas Godfrey. "Lo genial de contar con ella es que, mientras estamos rodando una escena, ella es capaz de ver cosas que a los demás se nos escapan, porque ha vivido con estos personajes y estos libros mucho más tiempo. En ciertos momentos, diría: 'quizá deberías pensártelo'. En última instancia, siempre enriquece la escena que estamos rodando. Así que tener un par de ojos extra es fantástico. Se ha implicado a fondo en la elaboración del guión y en asegurarse de que incluyamos todas las partes importantes de los libros. Se ha implicado incluso en la selección de actores, porque los personajes están muy claramente descritos en sus libros. Le enseñamos todas las pruebas y nos da sus opiniones, así que, en cierto sentido, es casi como una auténtica productora de la película".

"Me encuentro en una situación privilegiada, en la que trabajo con Summit y nos llevamos bien e intercambiamos ideas. Eso no es lo normal, por lo general, un escritor firma el contrato y ahí acaba todo... no vuelves a saber de nadie hasta que se estrena tu película", relata Meyer. "Tengo mucha suerte, porque encuentro fascinante todo el proceso de hacer películas. He aprendido mucho y he conocido a gente alucinante. Así que estoy muy agradecida por el hecho de que me hayan dejado tomar parte y de haber tenido la experiencia de asegurarme de que las películas reflejen mi visión. Me encanta eso. A veces rechazan alguna idea y comprendo por qué tiene que ser así, no se puede incluir todo. Pero el mero hecho de formar parte de la conversación es genial".

Godfrey cree que los fans estarán encantados con lo que el equipo de realización ha hecho en La Saga Crepúsculo: Eclipse. "Es la culminación de todo lo que estábamos esperando. Siento que ha sido un lento crescendo hasta llegar al definitivo choque de todos estos elementos externos que confluyen en Forks, Washington, todo por la decisión de Bella de convertirse en vampiro".


El reparto sigue creciendo
La Saga Crepúsculo: Eclipse supone el regreso del reparto principal ya establecido en Crepúsculo y La Saga Crepúsculo: Luna Nueva, con la incorporación del director David Slade y varios nuevos actores y personajes que se unen a la familia de Crepúsculo.

Entre los nuevos miembros del reparto figuran los vampiros Bryce Dallas Howard en el papel de Victoria, Xavier Samuel como Riley y Jodelle Ferland como Bree.

Se presentan además nuevos personajes quileute: Julia Jones y BooBoo Stewart como los hermanos Leah y Seth Clearwater, así como Alex Rice como su madre, Sue Clearwater (que ha quedado viuda tras la muerte de Harry Clearwater en La Saga Crepúsculo: Luna Nueva).

Otros nuevos miembros distinguidos del reparto son la candidata al Oscar Catalina Sandino Moreno como María, Jack Huston como Royce King y el cantante Peter Murphy como el primer vampiro.

Bella, Edward y Jacob: La cúspide del triángulo
Crepúsculo y La Saga Crepúsculo: Luna Nueva convirtieron a Kristen Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner en nombres conocidos por todos a nivel mundial por sus interpretaciones de Bella Swan, Edward Cullen y Jacob Black.

"Eclipse trata de un triángulo y de la tensión entre estos tres personajes", comenta la guionista Melissa Rosenberg. "La rivalidad y los celos, las emociones humanas más básicas de todas de amor y pérdida. En el fondo, es todo muy primario, y alcanza su punto crítico en esta película. Es un terreno muy rico para explotar. Es estupendo escribir el personaje de Bella, hacer salir su fuerza y poder explorar de verdad la profundidad de ese personaje, sobre todo tal y como lo interpreta Kristen Stewart. Posee una gran fuerza interior y se convierte en una verdadera heroína en esta historia. Me encanta escribir ese tipo de personajes".

"En última instancia, es una historia de amor. Se trata de encontrar una forma de que Bella y Edward vivan en un mundo en el que sabes que no deberían poder coexistir. Lo estupendo de estos proyectos es que hemos tenido a la misma guionista, Melissa Rosenberg, de principio a fin, y tenemos actores que entienden perfectamente a sus personajes. También entienden muy bien los libros. Saben exactamente lo que intentan conseguir en cada escena. Además, los directores que hemos elegido se han convertido todos en expertos en los libros que están dirigiendo. Así que, desde el principio de la producción, vuelves a encajar sin problemas con estos personajes. Tengo la sensación de que Rob y Kristen se ponen el vestuario de Bella y Edward y ya están metidos en sus personajes", comenta riendo el productor Wyck Godfrey.

"Llevamos ya un tiempo conviviendo con estos personajes", concuerda Stewart. "Vamos aprendiendo cada vez más sobre ellos a medida que pasa el tiempo y realmente nos adaptamos a ellos. Somos nosotros mismos por fuera pero, en cuanto empieza la acción, ya estamos en modo Jacob o modo Bella o modo Edward", afirma Stewart.

La Saga Crepúsculo: Eclipse explora distintos aspectos del amor: amor verdadero, amor fantástico y la posibilidad de enamorarse de dos personas a la vez.

"Para mí, el triángulo amoroso es sobre el amor fantástico y el amor real", explica la autora Stephenie Meyer. "Tuve oportunidad de coger a una persona y obligarla a elegir entre los dos. Bella se enamora realmente de Jacob en Luna Nueva sin darse cuenta, porque el único amor que ha tenido en su vida es un tipo de amor fantástico: locamente enamorada, la persona más increíble del mundo de repente te elige a ti, ni siquiera te puedes creer la suerte que tienes y todo es maravilloso y perfecto. Entonces se enamora de Jacob de una forma real, como suele ocurrir, en la que es tu mejor amigo y quieres pasar todo el tiempo posible con él. Pero no se da cuenta de lo que es, porque únicamente ha entendido el amor desde una perspectiva distinta".

"Así que, en Eclipse, ella tiene que aceptar esos sentimientos y comprender que lo quiere más que a un simple amigo, y entonces elegir entre eso y el amor de fantasía", agrega Meyer. "Por quiénes son los personajes, el final era inevitable para mí, Bella acabaría eligiendo a Edward, pero quería que tuviera que fijarse muy bien en lo que estaba eligiendo y a lo que estaba renunciando, y sopesar plenamente ambas opciones antes de decidirse".

"Edward es un buen ideal del puro amor verdadero que existe en el mundo. Mientras que Jacob es un amor más humano, que tiene fallos e imperfecciones, pero sigue siendo sincero", explica el director David Slade. "Creo que uno de los aspectos que resulta tan atractivo de estas historias es que postulan la idea del amor verdadero en una cultura en la que no es muy corriente. Pero es difícil crear una buena historia a partir de algo tan simple como el amor verdadero porque, normalmente, las grandes historias surgen a partir de los grandes conflictos. Lo que Stephenie ha hecho muy inteligentemente es crear un gran conflicto, pero no a expensas del amor verdadero, que es una de las razones por las que creo que estas películas y estos libros son tan populares y han alcanzado un éxito universal".

Vampiros: el bueno, el malo y la ley
Retomando su papel en la saga como la familia Cullen encontramos a Ashley Greene como Alice, Peter Facinelli como Carlisle, Nikki Reed como Rosalie, Jackson Rathbone como Jasper, Kellan Lutz como Emmett y Elizabeth Reaser como Esme.

"Los Cullen han decidido básicamente aceptar a Bella, pero lo cierto es que Bella los ha puesto en una situación peligrosa. Hay todo un clan de vampiros camino de Forks y van a tener que defenderse y defenderla", señala Godfrey.

Tanto los Cullen como los hombres lobo coinciden en su deseo de proteger a Bella y a la población humana de Forks y La Push. "En Luna Nueva, los genes de hombre lobo se activan porque hay vampiros en el pueblo. Nuestro reparto se amplía porque tenemos otros hombres lobo nuevos que entran en escena en Eclipse. Pero los hombres lobo y los vampiros son como agua y aceite... sencillamente, no se mezclan. Tenemos que pedir ayuda a los hombres lobo, que están encantadísimos de proporcionar, porque les gusta matar vampiros. Pero es una situación peliaguda, porque les estamos pidiendo que maten a esos vampiros y a la vez que nos dejen en paz a nosotros", explica Facinelli.

Alice Cullen, cuyo don mueve partes clave de la historia en La Saga Crepúsculo: Luna Nueva, se siente bastante coartada en este capítulo de la historia. "Alice se siente muy frustrada en Eclipse," desvela Greene. "A medida que los hombres lobo van entrando cada vez más en escena, su capacidad de ver el futuro se ve obstaculizada siempre que están cerca. Además, Victoria se ha espabilado y está aprovechándose de las lagunas de mis visiones. Sabemos que Bella está en peligro, pero no logramos adivinar si es por parte de Victoria o de los Vulturis o de algún nuevo ejército de vampiros neófitos. Así que Alice y el resto de la familia Cullen se pasan buena parte de la película intentando averiguar quién diablos va a por Bella".

"Sabemos que los Vulturis quieren ver a Bella convertida en vampiro cuanto antes", agrega Facinelli. "Pero es que, además, tenemos una tregua con los hombres lobo, lo que no hará ninguna gracia a los Vulturis. Así que en Eclipse suceden unas cuantas cosas complicadas".

El pasado de Jasper resultará clave para resolver la actual situación. "Descubrimos que Jasper siempre ha sido un soldado, incluso antes de convertirse en vampiro", afirma Godfrey. "En el siglo XIX, formó parte de otro ejército de neófitos, lo que le permite explicar a los Cullen lo que se les avecina. Los neófitos son más fuertes, más rápidos y se mueven por puro instinto. Los vampiros son más fuertes en el primer par de meses de su transformación".

Rathbone explica: "Jasper es en realidad de Texas, que es algo que tenemos en común. Jasper se convirtió en vampiro en la época de la Guerra de Secesión Americana, cuando resulta que era el comandante más joven de toda la Caballería de Texas. Lo sedujeron y se transformó cuando se topó con tres hermosas mujeres. Su jefa, María lo utilizó para dirigir a soldados neófitos durante las guerras vampíricas sureñas, que se disputaron por el territorio, y básicamente veían a los humanos como ganado".

"Cuando leí el libro de Eclipse, me gustó mucho la historia de Jasper", recuerda el director David Slade. "Nos ofrece una tremenda oportunidad de descubrir cómo funciona el universo de Stephenie. Históricamente, en los siglos XVIII y XIX, sería bastante corriente que los vampiros convirtieran a humanos en vampiros para crear un ejército con el que conquistar un territorio. Entonces los Vulturis empezaron a ponerle freno. Así que no había habido un ejército de vampiros desde que nadie tenía memoria, pero de repente aparece uno. Alguien ha creado un nuevo ejército de vampiros, no sabemos quién ni sabemos por qué. Pero no es nada bueno. El único clan remotamente cerca de la zona en la que están causando todos sus problemas son los Cullen, así que lógicamente tendrán que acabar chocando".

Al igual que Jasper, el público también descubre más detalles sobre el pasado de Rosalie en La Saga Crepúsculo: Eclipse. "Siempre hemos sentido que Rosalie se mostraba un tanto recelosa con respecto a Bella, y al final acabamos descubriendo los motivos de esa actitud y, por supuesto, son mucho más humanos de lo que imaginábamos", explica Godfrey. "El resentimiento que siente por el deseo de Bella de convertirse en vampiro es algo que atribuye a su propia historia, lo relaciona con lo mucho que perdió al convertirse en vampiro".

"La historia pasada de Rosalie nos dice mucho sobre por qué es el personaje iracundo que es en la actualidad", concuerda Rosenberg. "Sufrió una muerte increíblemente violenta, realmente horrible y brutal. Lo que le arrebató el ataque y asesinato de su personaje fue una vida muy prometedora y, sobre todo, su capacidad de llevar una existencia humana plena, envejecer con alguien y, en especial para ella, tener una familia".

"Para Bella, la historia de Rosalie saca a la palestra el problema de la familia y los hijos. Se trata de una de las cosas a las que tendrá que renunciar", agrega Rosenberg. "A Rosalie es algo que le fue arrebatado, pero Bella está haciendo voluntariamente la elección de renunciar a ello. Ése es el problema que tiene Rosalie con Bella. Cree que Bella se equivoca de decisión y la envidia por disponer de esa elección. La historia de Rosalie es muy importante en lo que respecta a la capacidad de Bella de tomar una decisión adulta".

"Rosalie valora su vida humana porque le fue arrebatada", comenta Meyer. Reed agrega: "Está resentida porque ella siempre quiso ser madre. Le encanta la idea de un estilo de vida muy clásico y convencional, quiere ser una esposa, cuidar de su marido y sus hijos. Ésa es su vida ideal. Así que se siente abatida al verse atrapada eternamente en esa forma".

La Saga Crepúsculo: Eclipse también nos permite entender mejor por qué Rosalie y Emmett son tan buena pareja. "Es simple", explica Reed. "Él necesita que lo mimen. Creo que es su dinámica de pareja, Emmett saca el lado juguetón de ella, el cariño que guarda en su interior y que solo comparte con él. Lo ve como si fuera un niño. Él la necesita y ella quiere que la necesiten. Rosalie quiere cuidar de alguien, ya que no pudo llegar a hacerlo con sus propios hijos".

"Emmett es mi niño interior. Me siento muy afortunado por haber podido interpretar este papel porque Emmett es como un niño despreocupado en el fondo. Tiene suerte de estar vivo en forma vampírica y con su fuerza multiplicada por diez, no tiene preocupaciones en la vida. Disfruta armando jaleo y metiéndose en una buena gresca con un oso aquí y allá. Disfruta al máximo de la vida con Rosalie a su lado. Ve a Rosalie como a su mujer, su amor, su ángel, porque lo salvó. Le debe realmente la vida a ella", comenta riendo Lutz.

Los actores tomaban parte en entrenamientos de lucha 6 días a la semana. "A pesar de ser un tipo atlético y que me encanten los deportes extremos, nunca había estado tan dolorido. Hasta los músculos más pequeños que sirven de base a los músculos más importantes no habían estado nunca tan doloridos. Estoy alucinado", asegura Lutz entre risas. "Me apunté a yoga para poder estirarme. Cada día me toca pelear o ir al gimnasio, y tomar montañas de comida. Y me encanta comer y me encanta hacer ejercicio, así que estaba deseando que llegara esto. Tenemos un gran equipo de especialistas que nos enseñan técnicas de lucha. Llevo mucho tiempo boxeando y he practicado algo de jiujitsu, así que es genial asimilar todo eso, porque muchos de los demás actores son nuevos en esto de aprender a luchar. Resulta divertido imponerme retos con algunos de los especialistas".

"Eclipse fue una de mis películas favoritas de rodar porque me pagaban por hacer ejercicio. Lo acababa haciendo tres veces al día. Nos poníamos con el entrenamiento de combate, luego iba al gimnasio y, por la noche, hacía yoga. Y arrastraba a Kellan conmigo, por lo que creo que todavía anda algo disgustado, porque estropea su imagen de tipo duro", comenta riendo Facinelli. "Pero ahora tiene mucha más paz interior. Así que fue divertido poder comer bien, ponerse en forma y luego tener ocasión de usar todo lo que estás aprendiendo en la película".

"Nunca había tenido un preparador personal para una película, así que ha sido un rodaje muy físico con una intensa preparación y me ha encantado", agrega Reaser. "En los entrenamientos de lucha nos enseñan cómo hacer que parezca que nos estamos dando una paliza. La verdad es que es mucho trabajo. Incluso simular siquiera que estás golpeando a alguien, o que alguien te está golpeando, da algo de miedo. Ha sido una experiencia interesante".

Slade encontró de vital importancia el tiempo de ensayo individual con cada uno de los actores. "En Eclipse estamos hablando de muchos, muchísimos personajes y hay cierto grado de legado, de historia que hay que respetar. Muchos actores supone muchos ensayos y atención individual", explica Slade. "Como director, intento ver a cada actor individualmente. En las fases iniciales de preproducción, me reunía regularmente con cada actor y hablábamos de cada escena. Por ejemplo, Peter Facinelli podía hablarme de lo importantes que eran los pañuelos para su personaje y por qué. Quiero conocer bien todos esos pequeños detalles que aporta cada actor".

"Básicamente, preparo el encuadre de cada escena con cada actor por separado para que, cuando nos juntemos todos, tenga mucha más frescura, porque cada uno tiene un punto de vista distinto y la verdad de la escena irá surgiendo", agrega Slade. "Creo que sería una locura tratar a los Cullen como una sola cosa, son todos personajes independientes. Así que hablé con cada uno sobre sus personajes, sus interacciones con otros personajes, lo que les gusta y no les gusta de ellos".

Además del placer que supuso trabajar con Slade, los actores de la familia Cullen estaban también encantados de volver a estar juntos. "Ha sido divertido volver a Vancouver y ver a todos mis amigos", asegura Reaser. "Cada vez que volvemos, todo – maquillaje, peluquería, la comprensión de nuestros personajes – va mejorando".

"En cada una de estas películas, retomamos todo donde lo dejamos", concuerda Facinelli. "Todo el reparto es como una especie de familia, así que es como volver a ver a un gran amigo al que no has visto en un tiempo. Es como si no hubiera pasado el tiempo en absoluto".

Reed agrega: "En cierto sentido, son como unas vacaciones, dejamos a un lado nuestras vidas reales y nos venimos aquí. Hay momentos en que estamos trabajando sin parar y es muy intenso, y estamos todos totalmente agotados, pero luego hay otras veces en que no estamos tan cargados y podemos estar simplemente pasando el rato juntos".

Además del director y sus compañeros de reparto, los actores comparten otra fuente de inspiración: los fans. "A veces navego por Internet y leo las cosas que escriben los fans sobre mi personaje. Me sorprende lo bien que comprenden algunos a Esme. En cierto modo, me han ayudado. Es lo disparatado de esto, nunca había trabajado en una película en la que pudiera navegar por la red y leer lo que una chica de Kansas opina sobre mi personaje, y me resulta útil", asegura Reaser entre risas.

En La Saga Crepúsculo: Eclipse encontramos a Victoria, la villana de las tres películas, empeñada todavía en vengar la muerte de su amado James, que pereció a manos de Edward y el resto de los Cullen en Crepúsculo. Esta vez, Bryce Dallas Howard se encarga de interpretar a Victoria, mientras que los recién llegados Xavier Samuel, como Riley, y Jodelle Ferland, como Bree, interpretan a peones de su plan.

"Tuvimos problemas de disponibilidad con Rachelle Lefevre, estábamos a tres semanas de empezar el rodaje y necesitábamos a alguien que pudiera ofrecer la misma intensidad y pudiera ser una gran villana", explica Godfrey. "Bryce era alguien que, al principio, incluso en Crepúsculo, nos habíamos planteado como una posible Victoria, así que fue la primera a la que llamamos. Por suerte, estaba disponible y entusiasmada de hacerlo. Es una presencia increíble con la que poder contar y es una delicia trabajar con ella. Lo acomete todo con una gran intensidad. No es nada fácil llegar a este grupo de personas que ya han hecho dos películas juntos, aparecer como la nueva y decir: 'mirad, esto no se trata de mí, se trata de La Saga Crepúsculo y yo solo quiero hacer todo lo que pueda por cumplir las expectativas que todo el mundo tiene con Victoria'. Se ganó a todos de inmediato y ha estado genial en el papel".

"Me obsesioné con todos los libros y siento un enorme respeto por lo que Stephenie ha creado", admite Howard. "Siento que aquí todos tienen una visión singular de lo que se puede lograr con estas películas y cómo llegar al público de la forma más verosímil posible. Entiendo perfectamente la fascinación que ejerce, porque es realmente apasionante y emocionante, y muy romántico... muy, muy romántico".

"Así que, al empezar como una fan y ahora formar parte de todo esto, siento una enorme responsabilidad por hacerlo lo mejor posible", asegura Howard. "Y también porque este personaje lo había creado Rachelle. Posee una gran belleza y una gran fuerza e hizo un trabajo verdaderamente exquisito, así que también quería honrar el impacto tan fuerte que había causado en el público con su personaje. Siento una responsabilidad hacia eso".

El actor australiano Xavier Samuel debuta en el cine norteamericano con su papel de Riley.

"Recibimos su audición por correo y Gillian Bohrer, de Summit, fue el primero en mandarme un correo electrónico diciendo: '¿Has visto la audición de este tipo? Es estupenda'. Es un joven actor fantástico. Lo trajimos para hacer una prueba ante la cámara y nos pareció que tenía la intensidad y sensibilidad adecuadas para Riley", recuerda Godfrey. "Riley como humano era un buen tipo, pero Riley como neófito tiene que ser un líder. Es el principal soldado pero, bajo todo eso, sigue siendo muy vulnerable, porque la ama y no se da cuenta de que no es más que un peón".

A lo que agrega Slade: "Xavier no es un actor que el público conozca, pero lo será. Es un actor excelente. En su prueba, conectó con mucha gente y nos llamó mucho la atención".

"Xavier es estupendo", concuerda Meyer. "Fue una de esas audiciones que nos dejó a todos boquiabiertos, o sea, lo captó perfectamente. Cada palabra que decía, tenía sentido".

"Riley es un personaje al que no se le dedican muchas páginas en el libro pero, desde un punto de vista cinematográfico, es alguien a quien necesitábamos dar algo más de cuerpo", comenta Slade.

"Lo de añadir más Riley fue algo que se hizo porque había mucha confusión sobre qué es lo que estaba pasando fuera de la pantalla", explica Meyer. "Para mí era muy evidente pero, cuando me encuentro frente a ocho personas en un cuarto que me dicen que no lo acaban de entender, tuve que explicárselo todo. Tenía cosas escritas de Riley, así que las revisamos y así nos entendimos todos. Para evitar que al público le pasara lo mismo, sabíamos que teníamos que mostrar un poco de lo que le estaba pasando a él. Necesitamos ver a Riley y lo que está haciendo, para poder entender esa parte de los hechos. Necesitábamos tener una representación visual de su historia. Así que tenemos más Riley".

"Es un personaje genial. Da un poco de miedo, pero está muy engañado", describe Meyer. "Es interesante, pasa por mucho. Se convierte en alguien muy oscuro, pero no empezó así, y recibe un severo castigo por sus decisiones".

"Lo inducen a creer que hay que detener a los Cullen, porque suponen una amenaza para su seguridad y su supervivencia", comenta Samuel.

Su principal tarea es ser el cabecilla de los irresponsables vampiros neófitos. "Los neófitos son más fuertes e inestables en su primer año de vida y constituyen excelentes soldados desechables", explica Rosenberg.

Samuel agrega: "Es difícil, porque son tan imprevisibles, están tan sedientos y tan distraídos, que cuesta mantenerlos controlados. Así que Riley tiene ciertamente trabajo de sobra en ese aspecto".

"Es complicado, porque no quieres recurrir a los clichés y estereotipos en lo referente a cómo interpretar a un vampiro", reconoce Samuel. "Creo que el truco está en tratar de conservar una cierta humanidad. Es muy divertido. Aquí estoy sacando a gente a la fuerza de coches ardiendo y lanzándolos contra las paredes, así que me lo estoy pasando bien. Todo el mundo te odia cuando eres el villano, pero no, yo lo estoy disfrutando".

Slade, por su parte, añade: "Stephenie Meyer tiene pensada la historia pasada de casi todos los personajes, tiene controlado todo ese universo en su cabeza. Así que parte del trabajo era colaborar con Melissa y hacer montones de preguntas a Stephenie, en cuanto a cómo dar forma a la evolución de este personaje, a quien teníamos que ver convertirse en vampiro, alzarse para controlar todo un ejército y ser engañado y manipulado".

A diferencia de Howard, Samuel no siempre fue un fan. "La verdad es que era uno de los no iniciados. No sabía gran cosa del tema, pero tenía muchas amigas que habían perdido la cabeza por Crepúsculo. Una hasta se desmayó cuando se enteró de que yo iba a interpretar a Riley", recuerda Samuel riendo. "Así que fui, compré los libros y me puse como loco a leerlos. Crean verdadera adicción. Así que ahora estoy muy versado sobre el universo de Crepúsculo".

"Crepúsculo es una fantasía verdaderamente apasionante y creo que la gente se identifica mucho con la idea del marginado, así como con todo el tema vampírico", continúa explicando Samuel. "Tiene todos los ingredientes adecuados, como amor, peligro, deseo y venganza, que lo convierten en algo realmente embriagador de ver, así que entiendo perfectamente por qué es tan popular".

Los realizadores seleccionaron a una joven actriz canadiense para interpretar a un desventurado miembro del ejército de neófitos. "Jodelle Ferland, que ya ha trabajado en un montón de películas a pesar de no tener más que 15 años, es sorprendentemente buena en el papel de Bree, que es uno de los personajes favoritos de Stephenie", asegura Godfrey.

"Pobre Jodelle", comenta suspirando Meyer. "Capta la vulnerabilidad de esa persona que está despertando a una nueva vida, que se siente confusa y suspicaz, pero no sabe qué hacer salvo cumplir lo que se le dice. Creo que Jodelle le aporta mucho de eso".

"Bree es parte del ejército de neófitos. Aunque está en el bando de los malos, la verdad es que no quiere ser malvada", explica Ferland. "No quiere ser un monstruo, pero se ve obligada a serlo. Se está dejando llevar, para poder estar a salvo".

Los Cullen intentan ofrecer asilo a la joven durante la batalla final, pero los Vulturis tienen otros planes. "Bree no quiere ser malvada, quiere ser buena. Le dicen que hay otra forma, que únicamente tiene que aprender a controlar sus instintos. Ella está dispuesta, a pesar de que le cuesta mucho. No conoce las reglas, así que no puede seguirlas. No es culpa suya, pero la castigan igualmente. Los Vulturis dan miedo porque no piensan realmente en lo que puede ser justo. No les importa que Bree no conozca las reglas".

Ferland estaba encantada de formar parte del fenómeno. "Me encantan los libros. ¡Son una pasada! Me puse como loca cuando me enteré de que había conseguido el papel. Después de que volvieran a llamarme, pasó como un mes hasta que supe que me lo habían dado. Estaba entusiasmada. No me lo podía creer. Parecía demasiado bueno para ser cierto, aunque no me permitían contárselo a nadie", recuerda riendo Ferland.

Para que Ferland pudiera preparar su papel de vampiro en ciernes en La Saga Crepúsculo: Eclipse, la autora Stephenie Meyer permitió a la joven actriz leer un borrador de su relato corto escrito desde el punto de vista de Bree, que ofrece más detalles sobre el personaje, no incluidos en la novela de Eclipse.

También regresan en sus papeles de miembros de los legendarios Vulturis, un venerable aquelarre de vampiros que deciden e imponen las leyes del mundo de los vampiros, Dakota Fanning como Jane, uno de los Vulturis más poderosos e importantes, y Cameron Bright como Alec, su hermano, así como los matones Vulturis Charlie Bewley como Demetri y Daniel Cudmore como Felix. Envían al cuarteto al noroeste del Pacífico para investigar los asesinatos de Seattle. Mientras se encuentran en la zona, también deciden comprobar en qué estado se encuentra el tema de la inmortalidad de Bella, de suma importancia para su líder, Aro, así como para Marco y Cayo, que se han quedado todos en Italia.

"Los Vulturis son, a falta de un término mejor, la mafia del mundo de los vampiros. Mantienen el orden y la paz en ese mundo. Establecen límites y reglas y, si no los cumples a rajatabla, te matan", explica Facinelli. "Pero esos límites y reglas no siempre están tan claros como nos gustaría para los vampiros buenos como nosotros. En la escena de combate de Eclipse están pasando muchas cosas, porque los Cullen tienen que librarse de los vampiros neófitos malos, pero además tenemos que hacerlo antes de que lleguen los Vulturis. Entonces, cuando llegan, no hacen más que complicar aún más las cosas, porque no estamos muy seguros de si querían que los vampiros malvados nos mataran. No acabamos de estar muy seguros de en qué bando se encuentran los Vulturis".

Al final de La Saga Crepúsculo: Luna Nueva, Aro decretó que había que convertir a Bella. "Estamos intentando averiguar la mejor manera de solucionar un problemilla que se está produciendo en Seattle, y de paso comprobar cómo está Bella y ver si sigue siendo humana", explica Fanning. "Creo que la perspectiva de poder destruir a Bella resulta muy emocionante para Jane. Creo que está nerviosa y deseando ver si será capaz de entrar en su cabeza cuando se convierta en vampiro".

Jane tiene la capacidad de infligir dolor con la mente. "Mi personaje siempre se ve oscuro e inquietante", explica Fanning. "Me da la sensación de que siempre anda tramando algo en su cabeza. Creo que es divertido poder ser malvada y tener ocasión de interpretar a un personaje que no se preocupa realmente por ser malvada, porque así es simplemente como es ella. Es completamente distinta de cómo soy yo y es especialmente divertido hacer de vampiro y llevar las lentillas rojas y tener todo ese vestuario tan alucinante".

Todos los actores que interpretan personajes de vampiros necesitaban entre hora y media y dos horas y media diarias de maquillaje y llevar lentillas pintadas a mano para lograr el aspecto característico de los vampiros. "No se puede ver por la periferia, ¡pero queda guay!", exclama Fanning.

A Cameron Bright, que interpreta al gemelo de Fanning, le apetecía divertirse un poco con las lentillas fuera del rodaje. "Lo que de verdad quiero hacer es pasearme por la calle mayor con estas pequeñas puestas", comenta entre risas Bright. "Me quitaría las gafas de sol al azar para ver la reacción de la gente. Tiene gracia, porque cada vez que salgo de mi hotel tengo ocho fotógrafos siguiéndome... Puedo dirigirme directamente a ellos y hablar con ellos. Llevo diez años trabajando como actor y no me había pasado nunca nada así. Me encanta... es un gran honor formar parte de esto".

A los actores Vulturis les encantó poder volver a la acción y trabajar con un nuevo director. "No podía pedir mejores personas con las que poder volver a trabajar", comenta Fanning. "Además, ha sido realmente estupendo trabajar con David. Es un director verdaderamente asombroso y fue muy emocionante tener ocasión de trabajar con él. Resulta extraño, interpretar al mismo personaje con otro director distinto. Pero la verdad es que ha sido una buena transición, David es realmente maravilloso y tiene mucho talento. Creo que mantiene la frescura, porque casi parece que esté en otra película, pero no del todo. Aporta un nuevo ambiente al plató y a la historia, lo que resulta muy interesante".

La manada de lobos crece
En La Saga Crepúsculo: Eclipse, la manada de lobos se alía con su ancestral enemigo para defender a Bella, que aprende más sobre el concepto lupino de la imprimación, así como sobre las leyendas de la tribu.

Los nuevos personajes quileute están interpretados por Julia Jones, Booboo Stewart y Alex Rice como la familia Clearwater: Leah, Seth y su madre Sue, que ha ocupado el puesto de su difunto marido en el consejo tribal.

También repiten sus papeles de La Saga Crepúsculo: Luna Nueva como miembros de la nación india Quileute los actores nativo americanos de la Primera Nación Chaske Spencer como Sam Uley, Alex Meraz como Paul, Kiowa Gordon como Embry, Bronson Pelletier como Jared y Tyson Houseman como Quil Ateara, que se ha transformado al fin en un lobo en La Saga Crepúsculo: Eclipse. Tinsel Korey también regresa como Emily, prometida de Sam Uley, al igual que Gil Birmingham como padre de Jacob, Billy Black.

"El reparto se amplía aún más en Eclipse... aunque se ampliará todavía más en Amanecer", explica Godfrey. "En cada libro conoces a nuevos personajes. En Eclipse, se presentan Seth y Leah, que se convertirán en personajes muy importantes más adelante. Es parte de lo que mantiene la frescura en estas películas, que vas conociendo gente nueva en cada entrega".

Stephenie Meyer se ha ido implicando cada vez más en el proceso de selección del reparto con Summit Entertainment y los realizadores. "Ha ido cambiando película a película. Tiene gracia, cuando empezamos, no nos conocíamos muy bien, así que teníamos mucho cuidado unos con otros, como eres con simples conocidos... te portas educadamente", recuerda Meyer. "Luego, con los amigos, eres algo más abierta. A medida que hemos ido pasando más tiempo juntos, me siento más cómoda ofreciendo mis aportaciones y, en general, se muestran muy receptivos. Así que ha ido aumentando con el tiempo y ahora he participado mucho más en la selección del nuevo reparto de Eclipse. Me impliqué mucho en las decisiones para elegir a Xavier, Julia y BooBoo, para asegurarme de que contábamos con gente que realmente pareciera dar vida a estos papeles. Es algo alucinante, a la par que extraño y surrealista, tener una imagen de gente que te has inventado, que básicamente son tus amigos imaginarios, y luego ver a gente real caminando vestidos y maquillados como ellos".

"Leah es la única mujer lobo y tiene muchísimos problemas. Le gusta estar sola, su padre ha muerto, tiene el corazón destrozado y el amor de su vida sale con su prima/mejor amiga. Sam Uley y ella estaban juntos en el instituto, pero luego él se imprimó con la prima de Leah, Emily. Se siente constantemente atormentada en Eclipse. Así que Leah es una chica furiosa, con muy mal genio. Lo odio todo", comenta riendo la actriz Julia Jones.

Leah es, además, la primera mujer en convertirse en lobo. "No quiere ser una mujer lobo. Leah proyecta buena parte de su ira hacia los Cullen por provocar la situación. Sin embargo, lo peor es que, cuando los chicos y ella adoptan forma de lobo, son telépatas", señala Jones. "Puede oír los pensamientos de todos los demás y resulta muy doloroso. Percibe lo que sienten todos ellos, incluido el amor de Sam por Emily, todo el tiempo, lo que supone un martirio aún mayor".

Sam Uley, interpretado por Chaske Spencer, sigue siendo el líder de la manada, tal como quedó establecido en La Saga Crepúsculo: Luna Nueva. "Sam es el macho alfa. Es el mandamás. Es una cuestión de linaje, si bien es cierto que Jacob lo rechazó y le pasó el testigo a Sam", explica Taylor Lautner. "Además, está Paul, que es el impulsivo. Jared, que es uno de los más divertidos, está interpretado por Bronson, que es todo un bromista, así que es perfecto. Y luego, Embry y Quil son los mejores amigos de Jacob, que siempre están allí cuando los necesita".

"La idea de la imprimación está sacada de la naturaleza. Los patitos lo hacen. Los lobos lo hacen. Es algo propio de los animales y sucede en realidad. Un patito se imprima con la imagen de su madre y siempre sabe quién es, aunque esté rodeada de muchos otros patos", explica Meyer.

"Jacob siente que debería imprimarse con Bella", señala Lautner. "Se pregunta: '¿Qué me pasa? Es la chica que amo. Es la chica con la que quiero estar, ¿por qué no me he imprimado?' Hace que Jacob se sienta confuso".

"Los lobos no tienen elección. Cuando encuentran a su alma gemela, ésa es su alma gemela", agrega Spencer. "Cuando Sam conoce a Emily, se acabó. Tiene que abandonar a Leah por Emily. Leah y Emily son primas y, naturalmente, Leah está dolida. Pero, por otro lado, Sam ataca sin querer a Emily y ahora tiene una enorme cicatriz. Aunque su amor por ella es eterno. Hay mucha culpabilidad en el aire".

Para obtener más información acerca de la verdadera Nación Quileute, se puede visitar su web en www.twilight-quileute.com.

Al igual que los vampiros, a los hombres lobo les encantó colaborar con su nuevo director. "Me gusta David Slade porque es muy meticuloso, sabe lo que quiere y es rápido", comenta Spencer. "Me gustan los directores así, va directo al grano, puedes ponerte a trabajar a buen ritmo y obtiene un buen resultado".

"David Slade dota sin duda a la película de un aspecto más oscuro y peligroso", agrega Meraz. "Creo que el libro ya lo tiene y eso es lo que pide. David es sumamente intuitivo y tiene un sentido asombroso del detalle. Se toma su tiempo en lo que hace. Siempre va por ahí con una cámara, sacado fotos de lo que le gusta".

"Es interesante como director porque creí que iba a ser mucho más serio. Pero tiene esa agudeza tan típicamente británica, un sentido del humor muy mordaz", asegura riendo Korey, "que, como canadiense, entiendo perfectamente. No sé muy bien cómo pensaba que sería un director de cine de terror, quizá mucho más siniestro y misterioso. Pero es genial".

"Creo que sin duda vamos a ver mucha sangre, lo que es alucinante. Creo que David va a darle su toque de casquería... sin olvidarse del aspecto romántico, por supuesto", agrega Booboo Stewart.


El rodaje de Eclipse: Acerca de la producción
El rodaje de La Saga Crepúsculo: Eclipse se inició el 17 de agosto de 2009 en Vancouver y prosiguió durante 11 semanas en numerosos exteriores de la Columbia Británica. Muchos de los escenarios de bosques que pueden verse en la película eran bastante remotos y de difícil acceso.

La enorme producción contaba con una gran unidad principal de rodaje y una segunda unidad completa, que se repartían las responsabilidades de las tres secuencias de acción principales: la persecución inicial del barranco entre los Cullen, los lobos y Victoria, luego la secuencia de instrucción en la que Jasper prepara al resto de la familia y a los lobos para lo que está por llegar y, en tercer lugar, la secuencia de la batalla final en dos escenarios a la vez entre la alianza Cullen/hombres lobo contra los vampiros neófitos en el claro del bosque por un lado, y Victoria/Riley contra Edward/Bella/Seth en la cumbre nevada por otro. El equipo de lucha, el de especialistas, el de efectos prácticos y el de efectos visuales trabajaron diligentemente para llevar las brutales escenas a la pantalla con seguridad y ayudar a los actores que trabajaban con los lobos virtuales. Además, buena parte de la acción de la película se desarrolla en exteriores en condiciones climáticas específicas según los personajes.

Todos los actores implicados en las complicadas secuencias de acción tuvieron que pasar por muchas semanas de preparación física especializada de lucha. Los actores y especialistas trabajaron incansablemente para ejecutar los golpes y movimientos ideados específicamente para cada uno, hasta el punto en que las propias limitaciones físicas y reales obligaban a intervenir al departamento de efectos visuales.

Además de contar una historia de amor en un entorno actual con elementos sobrenaturales como vampiros y hombres lobo, los realizadores tenían las restricciones adicionales de respetar los elementos establecidos por la autora Stephenie Meyer en la novela, además de tener en cuenta las decisiones creativas tomadas por los realizadores en las dos entregas anteriores, sin dejar que decaiga en ningún momento la emoción y la frescura de la narración. Escenarios como la casa de los Cullen, la casa de Bella, la casa de Jacob, el instituto de Forks y el prado – brillo de vampiro incluido – son todos elementos preestablecidos. Además, los realizadores tenían que lidiar con el vestuario de un amplísimo reparto de más de 3 docenas de personajes principales o destacados, junto a docenas de especialistas, además de las dificultades extra que suponen para una producción las múltiples historias pasadas de los distintos personajes, ambientadas en distintas épocas, y los fans ansiosos por descubrir hasta el más mínimo detalle.

"Nada más empezar la película vemos que Victoria ha vuelto y busca venganza. Se inicia una persecución y Victoria está volviendo del territorio de los Cullen al territorio de los lobos. No podemos meternos en el territorio del otro bando", explica Taylor Lautner. "Pero Emmett se deja llevar un poco y cruza la línea del tratado, así que Paul, el impetuoso, se mete en una pequeña pelea con él. Es la manera perfecta de empezar la película, porque Victoria está en medio de todo ello. Ella es la causante de este caos y los Cullen y los lobos se lanzan a matar".

Ese momento de adrenalina del primer acto permite al público hacerse una buena idea de lo explosivamente poderosas que son en realidad las míticas criaturas de esta historia. "En última instancia, nos damos cuenta de que la están persiguiendo a lo largo de un barranco. Cuando están a punto de atrapar a Victoria, salta al otro lado y se detienen. ¿Por qué no la siguen? Te das cuenta de que esa es la línea de demarcación entre el territorio de los vampiros y el territorio de los lobos. Así que, justo cuando cree haber escapado, zas, se encuentra a los lobos pisándole los talones. Tienes esa doble acción de los Cullen persiguiéndola en un lado y los lobos persiguiéndola en el otro, y ella va saltando de un lado a otro del barranco. Va a ser una secuencia verdaderamente fantástica", comenta el productor Wyck Godfrey.

"La persecución por el barranco es algo a lo que se alude en el libro, pero creíamos que era necesario ver esa persecución", comenta el director David Slade. "Creé unos 'storyboards' para tener claros los encuadres de cómo sería si viéramos realmente a los Cullen y los lobos persiguiendo a Victoria en la pantalla. Melissa tomó mis dibujos y escribió las secuencias. Así que es algo que es muy poca cosa en el libro, pero creí que sería algo muy divertido de ver. En la pantalla, quiero ver vampiros y lobos corriendo a velocidades de vértigo, saltando de un territorio a otro. Es una forma estupenda de establecer las reglas de los límites territoriales locales".

La unidad principal solía empezar con los diálogos y el trabajo de especialistas más sencillo, "pero luego dejábamos todos los momentos de mayor acción, con las grúas y los aparejos de cables, para el director de la segunda unidad, E. J. Foerster", explica Godfrey. Se escalonaron las semanas de trabajo de cada unidad para permitir a Slade asistir a los rodajes de la segunda unidad en sus días libres.

"E. J. Foerster es alguien con quien te interesa contar, es como una navaja multiuso que lo hace todo", asegura entre risas Slade. "Fue maravilloso. E. J. ha hecho tanto trabajo de especialistas que ya tiene un cerebro que sabe exactamente lo que necesita. Tenía que encargarse de hacer algunas de las escenas arriesgadas más importantes, que cuesta preparar algo así como siete horas para una sola toma. Todas nuestras tomas encajaron, todo nuestro vocabulario cinematográfico se mantuvo intacto. E. J. estaba en perfecta sintonía conmigo y siempre andaba preguntando: '¿Qué más puedo hacer? ¿Qué más podemos hacer para ayudar?'. Y la segunda unidad se ponía a ello como buenos soldados; ha sido un placer trabajar junto a ellos".

"Uno de los mayores retos de estas películas siempre ha sido plasmar la velocidad de los vampiros", agrega el productor Wyck Godfrey. "Una de las cosas que David y E. J. pensaron fue que queríamos mostrarlo en cámara. Queríamos de verdad mostrar a esos vampiros volando por los bosques a la extraordinaria velocidad que Stephenie Meyer describe en sus libros".

"Pensamos mucho en la velocidad vampírica, le dimos muchas vueltas a cómo podíamos abordar el problema de la física de mostrar algo con piernas que puede moverse tan rápido que no se ven. Recordamos el hecho de que un insecto bate sus alas mil veces por segundo y cómo se ve eso", recuerda Slade. "Así que se nos ocurrió cómo conseguir mostrar a gente que corra a 60 km/h e interactúe y lo haga de verdad. Quería que fuera sobrehumano, no sobrenatural. Quería evitar la idea de que es pura fantasía. Mantuve la cámara a la altura del ojo humano porque quería mantener la película en un espacio creíble y humano".

El director David Slade trabajó con su director de la segunda unidad, coordinador de especialistas, coordinador de lucha, supervisor de efectos especiales prácticos, supervisores de efectos visuales y diseñador de producción para crear un diseño de "alfombra mágica" con el que lograr esa enorme velocidad.

"Pensamos que podíamos conseguir que la gente corriera al menos a 60 km/h por medio de una alfombra mágica que creamos. También la llamábamos el trapo y, más tarde, se convirtió en el trineo de la muerte", recuerda riendo Slade. "Era básicamente una cinta larguísima y muy muy muy resistente, sujeta a la parte posterior de un vehículo, que saldría a toda velocidad por un camino a través del bosque, con especialistas y actores encima, mientras el vehículo de la cámara marcharía a toda pastilla en paralelo por el bosque. Cuando alcanzábamos la velocidad máxima, los actores empezaban a correr, y lo que conseguíamos en cámara era una persona corriendo a 60 km/h, que parece muy rápido. Es real, así que parecerá real".

El coordinador de especialistas John Stoneham, Jr. agrega: "Es una pieza de 1,2 m de ancho que remolcamos con un torno informatizado que lleva a la gente a rastras por el bosque. El desplazamiento tiene que ser suave, porque están corriendo a toda máquina".

"Es como en un aeropuerto, cuando alguien va en el pasillo rodante junto a ti. Está caminando, pero va más rápido que tú... es el mismo concepto", explica el supervisor de efectos visuales Kevin Tod Haug. "Ves el viento en ellos, con los brazos y las piernas moviéndose. Mientras no veas sus pies, parece que se mueven muy rápido, pero, de hecho, van tan rápido como pueden correr los humanos, más los 50-60 km/h que añade el vehículo que tira de ellos. Así pues, hemos establecido que los vampiros corren a 70-80 km/h, nunca se cansan y siempre pueden correr a máxima velocidad".

"Los actores se prepararon con una cinta rodante y luego los llevamos con el vehículo por bosques con árboles en primer plano y tienes a tus actores corriendo literalmente a máxima velocidad, pero todo lo que hay de fondo se ve pasar zumbando", agrega Godfrey. "Así que, por primera vez en estas películas, vemos realmente a vampiros correr por los bosques a una velocidad imposible, usando a los verdaderos intérpretes".

"En general, los efectos que mejor quedan son siempre aquellos que se puedan realizar en la medida de lo posible de manera práctica", asegura Haug. "Así que empiezas planteándote qué es lo que puede hacer de verdad un actor o un especialista. Haces todo lo que puedas de manera práctica delante de la cámara, porque seguramente sea la mejor forma de hacerlo. Luego, cuando ya no se pueda llevar más lejos, entran en acción los efectos visuales. Tiene que haber cierta tensión, cierta dificultad. A David le interesaba mucho que se pudiera sentir la gravedad, el peso y todas los indicios de velocidad que normalmente se perciben en alguien que va tan rápido".

"La escala de lo que estamos haciendo en la secuencia de persecución no es comparable a nada que haya visto hacer antes en una persecución a pie. Los vampiros viven en el mundo real, pero pueden hacer más, aunque lo hacen únicamente cuando es necesario o apropiado. He visto realizar un trabajo de esta envergadura para persecuciones en coche o en avión pero, para una persecución a pie, es verdaderamente excepcional", comenta Haug. "Cada plano tiene que estar básicamente en una ubicación distinta, porque se mueven demasiado rápido. Una persecución a pie tiende a ser por un tejado y por una calle, de modo que puedes hacer buena parte de la misma en el mismo lugar. Pero no puedes hacerlo cuando tus vampiros se mueven a unos 80 km/h. Así que tienes que tratarla como si fuera una persecución en coche por el bosque".

James Tichner ejerció de supervisor de efectos visuales de la segunda unidad. "Victoria se está burlando y probando ambos lados de la zona de los lobos y la zona de los vampiros en su incursión. Las instrucciones básicas que tenía nuestro director de segunda unidad, E. J. Foerster, para esta secuencia eran rápido, rápido, rápido. Esto es una persecución en coche. Vamos a rodar a toda pastilla... vamos a sacar numerosos ángulos. Creemos que tenemos el mayor número de ángulos en una sola escena en toda la historia de rodajes realizados en Vancouver. Creo que sacamos casi 200 ángulos en esa secuencia de persecución".

"Hemos dividido la secuencia en tres partes: el principio, donde corremos por el bosque y mostramos mucha acción estilo 'parkour'. Hemos roda