Aproximación en clave de parodia acerca de la larga trayectoria política del presidente francés. Co-dirigida por Karl Zéro y Michel Royer supone una recopilación de algunos de los mejores gags de un exitoso y sarcástico espacio televisivo francés, la conjunción del cual ha derivado en esta divertida película, a su vez convertida en una auténtica biografía no autorizada sobre Chirac.

Seleccionada para participar en la próxima edición del Festival de Cine Político de Barcelona.

Ficha artística
Jacques Chirac - Didier Gustin - Edouard Balladur - François Baroin - Raymond Barre - Fabien Barthez - François Bayrou - Daniel Bilalian

Introducción
Cada domingo, Karl Zéro es seguido por dos millones de telespectadores, pero no tiene la aprobación de todo el mundo, ya que cuesta mucho definirlo políticamente. Y sin duda, porque mezcla la información y la diversión, matrimonio sacrílego ante los ojos de ciertos intelectuales. Sin embargo, es un observador excepcional de la vida política. En 10 años, ha recibido a todos los líderes de todas las ideologías políticas, con encuentros regularmente off de récord – excepto con la extrema derecha. Estando siempre en medio del fuego político, forzosamente es el más indicado para dirigir el largometraje de Jacques Chirac, y teniendo en cuenta, que sus cualidades pedagógicas son la sal de su emisión televisiva, era toda una garantía de éxito.

Entrevista con Karl Zéro
P: ¿Cómo nació la idea de esta película?
R: Michel Royer me ha estado hablando de este tema durante muchos años.

Trabajaba conmigo en Vrai Journal de Canal +, y nos descubría cada semana de su basto archivo algo gracioso que concernía a mi invitado político, con este talento increíble, ese ojo clínico que descubre siempre la perla más rara... Concerniente a Chirac, que en tanto es el Presidente de la República, no participa en ninguna de las emisiones políticas. Michel elaboró minuciosamente un documento que te hacía llorar de risa sobre el paro, desde el punto de vista de Chirac. Fue en ese preciso momento cuando empezamos a darle vueltas a la idea de hacer una película para la gran pantalla que fuera al mismo tiempo una comedia y no una película política, pero si ‘sobre’ la política.

P: ¿Cuál es la diferencia?
R: En la piel de Jacques Chirac no es la película propagandística anti o pro Chirac. Es una explicación del medio en el cual Chirac está inmerso desde su salida de la ENA (Escuela Nacional de la Administración), cuando los tecnócratas se apoderaron del gaullismo. Dicho así, puede parecer ingrato, pero os aseguro que ¡es verdaderamente cómico! Pero sobretodo, expone la realidad del sistema francés y de su ‘buen gobierno’. Los recientes acontecimientos a cerca del CPE (Contrato Primer Empleo) lo muestran: los jóvenes se han re-apropiado el tema político.

La carrera de Jacques Chirac, es la historia de un sistema en el cual se vive siempre un universo cínico, muy duro y cómico al mismo tiempo.

P: ¿Cómo han escogido entre tantos kilómetros de archivo que existen sobre Chirac?
R: ¡Se empezó por visionarlos todos! Esto ha sido muy largo, pero muy divertido. Hemos estado durante un año rodeados de videos, he acabado arrancándole los pelos a Michel, pues a mi ya no me quedan!

Un día me dije: ¿y si fuera Chirac, quien contara su propia historia? Como si pasáramos el tiempo cenando tranquilamente con él mientras se explayaba libremente, ojeando el álbum de su vida… Tendríamos un punto de vista, el suyo, su propia visión de su increíble carrera sobre los asuntos que vivió, sobre él mismo, sobre sus motivaciones, sus capacidades, sus dudas y sus faltas... Nos encontraríamos en la PIEL DE JACQUES CHIRAC. El título estaba claro. Escribí un largo texto en primera persona, intentado ser lo más honesto posible poniéndome verdaderamente en su lugar, incluso en los temas más molestos e incómodos, ser su abogado del diablo como el de Dios…

P: Habéis contactado con el Elysée para informar al Presidente que ibais a hacer una película sobre él?
R: Inútil, en Francia existen servicios de información muy efectivos que lo tienen al corriente minuto a minuto del progreso de nuestra obra… He tenido la suerte de desayunar con su consejera de comunicación, su hija Claude, pero después de diez años, es extraño que no me devolviera la llamada… Luego, como le hacemos decir a Chirac en la película: “Para esta película, no pregunten a Claude, ¿verdad? ¡Claude es muy severa!

Comentarios de Michel Royer
Mi trabajo era buscar las ‘pepitas de oro’ en los archivos de televisión, a menudo he tenido la ocasión, durante quince años, de revisar imágenes de Jacques Chirac. Es el hombre político francés que ha sido más seguido por las cámaras de televisión. Primer ministro, Alcalde de París, Presidente de la República, jefe de partido y eterno candidato, ha sido el hombre de incalculables temas, entrevistas y retratos. Todo esto se traduce en millares de horas, conservadas en los archivos y que nos permiten volver a trazar su trayectoria, llenas de peripecias rocambolescas, de combates y de crisis, de victorias y derrotas, de giros y de traiciones. Es posible, con los extractos más significativos, contar su destino novelesco e ilustrar las múltiples facetas de su personalidad. En resumen: componer un retrato, épico y digno para la gran pantalla. Es nuestra primera apuesta.

Este retrato de Jacques Chirac, con todo el respecto que al que nos debemos al hombre y a su cometido, no podría ser nunca una broma. Sin forzar la realidad, el personaje, la trayectoria, el destino, todo sobre el Presidente actual invita al humor, a la mueca y la empatía, incluso al cinismo. En los archivos, se le encuentra fácilmente simpático, a menudo divertido, voluntariamente o involuntariamente, y como todos los grandes políticos, es un actor sin igual.

La conquista y el desempeño del poder comportan una gran parte de representación cómica, particularmente visibles en las imágenes de televisión. Nadie encarna mejor que Jacques Chirac la comedia presidencial, quien, en nuestro país, se representa cada día desde hace 40 años ante las cámaras de televisión. Nuestra segunda apuesta es que la película, forzosamente política, sea igualmente divertida y graciosa.

Nuestra película, es por tanto un retrato, libre, subjetivo e irónico del Presidente y tercera y última apuesta, es una película enteramente realizada con las imágenes de archivos de televisión. Se trata de llevar a la gran pantalla las imágenes de la pequeña. De transformar en espectaculares las imágenes cuotidianas. Porque se trata ante todo de un espectáculo. Es una visión tragicómica del chiraquismo y de la época chiraquista, jugando con el poder de las imágenes y sobre las emociones del cine, empezando por la risa. Es una película sobre Jacques Chirac, es una película con Jacques Chirac. Es a él a quien seguimos en esta historia auténtica, pues es el actor principal, héroe abracadabresco. Tiene la voz grave y neutra de los documentales serios, hemos preferido el tono divertido de la autobiografía no autorizada.