Lars von Trier sufre una fuerte depresión que le ha obligado a anunciar su retirada temporal del cine. El realizador danés está en tratamiento médico para superar su enfermedad. Ha indicado que los médicos le han dicho que podría tardar incluso 2 años en volver a ponerse tras las cámaras, pero él es más optimista y dice que en unos meses podría ponerse al frente de su próximo proyecto, Antichrist. "No puedes hacer una película y estar depresivo al mismo tiempo", ha comentado.
Entre sus últimos trabajos se encuentran Manderlay, Dogville y El jefe de todo esto.
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