Una película galardonada con el premio Media Arts Festival en 2002.

Cortometraje extra: Star chan
Hace mucho tiempo en una galaxia muy lejana, las fuerzas rebeldes luchaban por deshacerse del yugo del imperio. Sólo un joven de extraordinario valor puede devolver la paz a la galaxia... ¡Shin chan! El espacio estelar tiembla con Star Chan, un divertido episodio inédito incluido en este DVD.

El terremoto de los dibujos animados lleva sus travesuras al espacio en una hilarante parodia de la saga galáctica más famosa de la historia del cine. La princesa Aliolia, Can Vader y el Cerdito Valiente con su nave el Gorrino Milenario son algunos de los protagonistas de una aventura que los seguidores de Shin chan disfrutarán de principio a fin.

Shin chan, a la cabeza de la resistencia rebelde, pondrá todo su empeño en acabar con la tiranía del Emperador y no se detendrá ante nada. Su descaro se hará patente, sin duda, en el combate de espadas de luz más delirante de la historia.

Todos los personajes habituales de la serie tienen su papel en la parodia. El gran misterio es... ¿quién se esconde tras la máscara de Can Vader?

Extras y características técnicas
- Cortometraje especial: Star Chan
- Storyboard
- Tráiler
- Trivial
- Pinta y colorea
- Puzzles
- Entrevista al director Keiichi Hara y al productor Hitoshi Mogi

Sonido Dolby Digital 5.1.
Formato de pantalla 16:9.
Idiomas: castellano, catalán, euskera, gallego, portugués y japonés.
Subtítulos: castellano.

Comentarios del director Keiichi Hara
Los japoneses de hoy en día sólo conocemos a los samuráis por la imagen de ellos que existe en los registros o a través de las leyendas o películas. Por esto, para esta película, decidí usar mi imaginación y plasmar a los samuráis tal y como yo creo que fueron.

Los samuráis fueron guerreros conocidos en todo el mundo. Su valor en tiempos de guerra es algo más que evidente, pero en la vida diaria eran personas que se esforzaban por mantener un control exquisito sobre sus actos y pensamientos. Aborrecían los actos deshonrosos por encima de todo: la cobardía, el miedo a la muerte, los aires de grandeza, etc. De la muerte tenían una visión muy particular: desde una edad muy temprana se les enseñaba el ritual del seppuku (forma de suicidio que consiste en abrirse el estómago con una espada). Estaban preparados para morir en cualquier momento. Con nuestra mentalidad actual, esto resulta algo inconcebible, pero en aquella época morir suicidándose por el seppuku equivalía al más elevado de los honores.

Los samuráis se enfrentaban a cualquier enemigo lanzando un grito de victoria (en japonés, Appare!) que literalmente significa "cielo despejado". Por eso quise mantener ese mismo grito en el título original de la película (Arashi o yobu appare! Sengoku daikassen), de manera que reflejase la manera de actuar y el código de honor del samurái bajo un vasto cielo azul. Ya fuera en tiempos de guerra o de paz intentaban por todos los medios que los suyos fueran actos de honor, sin caer jamás en la vergüenza y teniendo siempre presente el ideal de belleza, por el que fácilmente podían entregar la vida.

La historia tiene lugar en el Kasukabe de 1574 (aunque en aquella época en Japón todavía no existía el calendario occidental, de hecho, ni siquiera existía el país como nación; Japón como tal no se constituyó hasta la segunda mitad del siglo XIX), cuando el gobierno militar que defendían los samuráis perdió su influencia. Por su parte, los señores feudales de cada región comenzaron una guerra para aumentar su poderío militar. Así comenzó el llamado "período de las guerras civiles" (sengoku jidai, 1467-1573), que continuó durante los siguientes 100 años. Los samuráis anunciaban su nombre ante sus enemigos y peleaban blandiendo sus espadas y escudos. Los adversarios se tenían un gran respeto mutuo y si alguien moría enfrentándose a un importante samurái, su muerte constituía un honor para los suyos. Para los guerreros de aquella época, una vida larga era motivo de vergüenza, ya que la muerte en el campo de batalla equivalía al honor más absoluto. Cuentan que detestaban la idea de morir víctimas de una enfermedad por lo que, al saberse aquejados de una dolencia grave, preferían poner punto y final a sus vidas por medio del seppuku.

En 1543, un barco portugués llegó a las costas de Japón transportando unas armas de fuego que cambiaron la situación por completo. Los fusiles empezaron a producirse en masa para su uso en el campo de batalla, aunque al principio apenas había dos modelos diferentes. Los samuráis, que se enorgullecían de su manera de pelear cuerpo a cuerpo, consideraron los fusiles como armas para cobardes. Sin embargo, esos cobardes sin nombre ni fama iban acabando con sus enemigos uno tras otro.

En la pelea cumbre de la película Kagemusha, la sombra del guerrero, el director Akira Kurosawa nos muestra cómo el ejército a caballo de un señor feudal, considerado el más poderoso de la época, es aniquilado por completo por un escuadrón enemigo armado con fusiles. Pues bien, la historia de Shin chan transcurre durante el mismo año en el que tuvo lugar aquella famosa batalla histórica. A medida que el uso de armas de fuego se extendía, el honor iba desapareciendo del campo de batalla y el balance de las contiendas era cada vez más trágico. 30 años después de los acontecimientos que narro en esta película, cierto señor feudal se hizo con el control de todo el país, estableciendo su capital en Edo (la actual Tokio), cortando las comunicaciones con el extranjero y cerrando Japón a cualquier influencia exterior. A partir de ese momento y durante 250 años, Japón vivió una larga época de paz y de desarrollo cultural insular.

He oído decir que en España Shin chan ha despertado casi tanta polémica como en Japón. Supongo que es inevitable... Sin embargo, para nosotros Shin chan es mucho más que un chiquillo travieso y descarado. Al contrario, yo le veo como un aliado de la igualdad entre los hombres, con un fuerte espíritu de crítica social. Me parece estupenda esa faceta suya que le permite hacerse amigo de cualquier persona. En el fondo, dudo que la intención de Shin chan sea nunca la de fastidiar deliberadamente a nadie. Seguro que los que disfruten de esta película se llevarán más de una sorpresa.