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Los extraños cartel reducidoLos extraños(The strangers)
Dirigida por Bryan Bertino
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El equipo técnico de LOS EXTRAÑOS incluye al director de fotografía PETER SOVA (El caso Slevin, Obsesión/Wicker Park); el diseñador de producción JOHN D. KRETSCHMER (The List, Vaya partido); el montador KEVIN GREUTERT (Room 6/Puerta al infierno, cinco de las seis entregas de Saw), y la diseñadora de vestuario SUSAN KAUFMANN (The Promotion, La cosecha de hielo). La música es obra de TOMANDANDY (Parking 2/P2, La alianza del mal/The Covenant). La supervisión musical corre a cargo de SEASON KENT (Dueños de la calle, Bonneville). Los productores son DOUG DAVISON (Retratos del más allá/ Shutter, The Eye/Visiones); ROY LEE (Possession, The Eye/Visiones), y NATHAN KAHANE (30 días en la oscuridad, Juno, Mr. Magorium y su tienda mágica). Los productores ejecutivos son KELLI KONOP (Juno, The Messengers); JOE DRAKE (El grito/The Grudge, 30 días en la oscuridad, Juno); SONNY MALLHI (Possession, Retratos del más allá/Shutter); TREVOR MACY (Doomsday/Día del juicio, El regreso/The Return), y MARC D. EVANS (Doomsday/Día del juicio, Sin salida/Waist Deep).


Se abre la puerta: Los extraños tienen luz verde
Hace tiempo que el guionista y director novel Bryan Bertino prefiere contar la historia de personajes complejos. Considera que el género de suspense permite conectar con más facilidad con el público. Dice: "Cuando empecé a escribir, no tardé en descubrir que una forma de conectar con las personas era a través del miedo. El miedo permite hablar de otras emociones, de otros sentimientos".

Para su primer guión, que en un principio se llamó "The Faces" (ahora LOS EXTRAÑOS), escogió el tema de la violencia sin sentido. El cineasta explica: "Se cometen un sinfín de crímenes que no tienen explicación. Simplemente ocurren. Sólo nos queda enfrentarnos a las consecuencias". A partir de este concepto escribió un guión centrado en uno de nuestros temores más primitivos: ¿Qué puedo hacer si me atacan unos extraños decididos a hacerme daño a mí y a la persona a la que más quiero?

Hablando de lo que le inspiró, Bryan Bertino dice: "Suele faltar algo en muchas películas de miedo actuales. Decidí escribir un guión duro y sobrio con pocos personajes, de los cuales dos son una pareja que se ha formado antes del comienzo de la historia. No quería perder de vista a los personajes por culpa de los sustos. Pensé que si me concentraba en los personajes y su miedo, podría despertar más emociones en el público".

Antes de empezar a escribir, estudió el mundo que imaginaron los maestros del cine de terror de otra época. Dice: "Me inspiré en los thrillers de los años setenta. Quería hacer una película que explorara una situación y tocara a los personajes en su punto más vulnerable, tal como se hacía entonces".

La historia de LOS EXTRAÑOS transcurre en un periodo de horas, y empieza poco antes de los terribles acontecimientos. Conocemos a una pareja que ha ido a la boda de una amiga de universidad de la chica. Cansados y bastante bebidos, Kristen y James regresan a la casa donde pasan el fin de semana. Poco después, reciben una visita inesperada: tres intrusos enmascarados.

Como casi todas las grandes películas de miedo, se basa en hechos reales. El director recuerda: "Parte de la historia se debe a un recuerdo de infancia. De pequeño, vivía en una casa aislada a pesar de tener vecinos. Una noche, mis padres habían salido, y llamaron a la puerta. Abrió mi hermana pequeña y preguntaron por alguien desconocido. Luego nos enteramos de que habían llamado a varias casas del barrio para entrar en la casa si no había nadie. En LOS EXTRAÑOS, el hecho de que estén en casa no impide que entren, todo lo contrario".

En otoño de 2004, Bryan Bertino dio el guión a su representante, Michael Connolly. Le gustó y pensó que no sería difícil venderlo, por lo que organizó una reunión con Vertigo Entertainment. El productor ejecutivo Sonny Mallhi y sus colegas de Vertigo, los productores Roy Lee y Doug Davison, leyeron el guión y estuvieron de acuerdo en que tenía una cualidad especial. Sonny Mallhi dice: "Era diferente de las otras películas de terror, también de las películas producidas por Vertigo. Tenía una fuerte dosis de realismo, dejaba la sensación de que podía pasarle a cualquiera".

Al productor ejecutivo no sólo le fascinó la calidad y belleza del guión, sino su desgarrador final. "Me atrajo la historia de amor de los dos protagonistas", explica. "La profunda relación entre Kristen y James, dos personas que caen bien, es un elemento que no suele estar presente en este tipo de películas".

Vertigo compró el guión, y Bryan Bertino se apresuró en dejar su trabajo. "Estaba convencido de que ya no me haría falta trabajar como maquinista", recuerda, riendo. Mientras seguía puliendo el guión, Vertigo ofreció compartir el proyecto con otra productora, Mandate Pictures, con la que ya se habían asociado con éxito para producir El grito/The Grudge y El grito 2/The Grudge 2. LOS EXTRAÑOS no tardó en tener oficina en Rogue Pictures, donde Vertigo ya se ocupaba de otros proyectos.

Como es lógico, los productores hablaron con varios directores, pero todos querían adaptar el guión y personalizarlo. Finalmente, decidieron escoger al propio guionista, convencidos de que era el más idóneo para dirigir la película.

Bryan Bertino dice: "Nos pareció que yo era el más adecuado para darle vida sin perder la intención original". Aun así, el director novel tuvo que superar ciertos escollos: "Como realizador, hubo momentos en que empecé a discutir conmigo mismo como guionista. Eso sí, siempre tuve muy claro en qué dirección debía ir la historia, así como el equilibrio entre los personajes".

Una vez pulido el guión y escogido el director, quedaba encontrar a dos actores para encarnar a la pareja atacada y otros tres para los asaltantes.


Unos extraños llaman a la puerta: el reparto de la película
Además de conservar la visión del guionista, los productores querían incluir en el proyecto a una actriz que nunca hubiera hecho una película de terror. Bryan Bertino dice: "Liv es de las pocas actrices que, a pesar de ser guapísima, sigue siendo accesible. Cuando supe que estaba disponible, me bastó con hablar con ella una vez para querer darle el papel".

La actriz, que encarnó a la princesa elfa Arwen en El señor de los anillos, de Peter Jackson, reconoce que se quedó impresionada al leer el guión: "Lo leí de un tirón, no podía parar. Fue la primera vez en un par de años que estaba decidida a hacer el papel pasase lo que pasase".

"Me atrajo la historia de amor paralela a una dramática trama de terror, todo era muy poco convencional", sigue diciendo Liv Tyler. "Me gustó sobre todo el estilo de Bryan. Dice mucho, pero nunca lo dice todo. A menudo, en las películas, los diálogos lo explican todo. No es el caso de Bryan, escribe de la misma forma que se habla, dejando preguntas en el aire".

Scott Speedman, al que hemos visto no hace mucho en la piel de un licántropo a su pesar en Underworld y Underworld: Evolution, encarna a la otra mitad de la pareja asediada. Hablando del papel, dice: "No se ‘escoge’ a Kristen y a James por algo que hayan hecho en el pasado. No hay ningún elemento sobrenatural. Como la familia Manson, los extraños sólo quieren hacer daño de forma gratuita". También le entusiasmó el guión: "Bryan no asusta porque sí. Da tiempo al público a que conozca a los personajes antes de que todo se convierta en aterrador. Ese planteamiento me interesó desde el principio".

Además, le gustó mucho la idea de que Liv Tyler interpretara a Kristen: "Era uno de los mejores guiones que había leído, pero también sabía que si Liv Tyler trabajaba en la película, funcionaría. Es muy orgánica, llena de vida, capaz de generar química con un poste".

La actriz le devuelve el cumplido: "Nunca había trabajado tanto con un actor, estamos juntos en casi todas las escenas que tenemos. Scott es generoso, lo que nos permitió transmitir la intimidad descrita en el guión, dejar claro que Scott y Kristen se quieren".

Los dos actores se quedaron atónitos al descubrir que el autor del guión era más joven que ellos. "No podía creerme que iba a trabajar con un director más joven que yo", dice la actriz.

Bryan Bertino dice: "He tenido mucha suerte. Liv y Scott supieron construir sobre lo que yo había escrito; aportaron otros elementos a Kristen y James".

Una vez escogida la pareja, quedaba buscar al trío de intrusos. Los cineastas debían encontrar a tres actores capaces de aterrar al público a pesar de tener la cara siempre tapada. El director y los productores sabían que los espectadores, al no ver la expresión de los intrusos, proyectarían su miedo en las acciones de estos y, a su vez, sentirían aún mayor empatía por la situación de la pareja.

El productor ejecutivo Sonny Mallhi dice: "Preguntábamos a los actores que nos dijeran cómo veían a los extraños, lo que nos ayudó a encontrar intérpretes alejados de la típica película de terror". Por ejemplo, la esbelta actriz Gemma Ward es exactamente tal como el guionista imaginaba a Dollface (Muñeca), cuya cara se esconde detrás de una máscara de muñeca enmarcada por una melena rubia lisa. Aparentemente dulce e ingenua, la primera extraña que ve el público es realmente intimidante.

Hablando de la extraña que llama a la puerta, Bryan Bertino dice: Mientras escribía el guión, veía a Dollface. Debía ser guapísima, afectuosa, pero con una faceta oscura subyacente, quizá aún más que los otros dos. Cuando vi a Gemma, supe que era perfecta para el papel, sobre todo porque su mirada es muy expresiva. Tiene un alma de persona mayor en un cuerpo joven. Supo llevar el personaje a otro nivel. Es muy instintiva y añadió toques imprescindibles a Dollface".

La supermodelo, que tiene su primer papel de importancia en LOS EXTRAÑOS, dice: "Reconozco que soy una fan del cine de terror, pero cuando leí el guión de Bryan, me pareció diferente. Es una historia dura e intensa. Por mucho que Kristen y James rueguen, los extraños harán lo que han venido a hacer. Para inspirarme, leí Helter Skelter. Me ayudó a entender cómo funciona la mente de una chica retorcida".

En opinión de Kip Weeks, al que hemos visto recientemente en el drama deportivo Camino a la gloria, encarna a The Man in the Mask (El enmascarado), un auténtico monstruo escondido tras una máscara de tela, como un espantapájaros: "El trío cruza conscientemente las fronteras del racionalismo. Saber que cualquiera puede encontrarse en la misma situación que Kristen y James me pareció de lo más interesante".

Hablando del intruso masculino, el productor ejecutivo dice: "Queríamos que diera miedo, pero tampoco debía asustar como los conocidos personajes enmascarados de las películas de terror. Kip es alto, pero no es enorme. Comunica al público todo el horror que quiere infringir su personaje".

El papel del tercer miembro del trío, Pin-Up Girl (La guapa), que lleva una máscara tipo Betty-Boop, recayó en Laura Margolis, de la serie "Dirty Sexy Money". "Laura entendió inmediatamente al personaje", dice Sonny Mallhi. "Es más pequeña que Kip y Gemma, lo que encaja físicamente con Pin-Up Girl, al parecer la más calmada de los tres".

La actriz recuerda: "El guión me entusiasmó. Me sorprendió lo trabajados que estaban los personajes de Kristen y de James, y lo que los extraños hacen a su relación".

Glenn Howerton hace el papel de Mike, el amigo que llega a recoger a James. Conocido por su papel cómico en la serie "It’s Always Sunny in Philadelphia", el actor no iba a perderse la oportunidad de actuar en una película de terror. Seguidor de Pesadilla en Elm Street y Viernes 13, apreció la inteligencia del guión de Bryan Bertino: "No va de grandes sustos y todo el mundo gritando. Es mucho menos obvio, usa el mejor terror de todos, el psicológico".


Cómo modelar el miedo: el diseño de producción
Dado que el 90 por ciento de la película transcurre dentro y fuera de una casa en plena noche, el diseño y la construcción debían estar terminados mucho antes de que empezara el rodaje. El director realizó un cuidadoso storyboard con el diseñador de producción John D. Kretschmer, que tiene en su haber películas como Verano de seducción y El impostor.

Para incrementar la sensación de "puede pasarle a cualquiera", no se especifica una zona geográfica en concreto. El diseñador de producción dice: "Bryan describe la arquitectura de la casa según avanza el guión, lo que me permitió saber hacia dónde iba el pasillo, dónde estaban la cocina y los dormitorios. Tiene mucho sentido visual. La primera vez que hablamos, quedó claro que estábamos en la misma onda en cuando al estilo de la casa".

De hecho, cuando los dos compararon los planos que habían dibujado de la casa, se quedaron atónitos por su similitud. John Kretschmer dice, riendo: "El mío era casi idéntico al que él había dibujado hacía tres años a 5.000 kilómetros de distancia".

Sigue diciendo: "En el género de terror, la casa suele estar aislada en lo alto de una colina. Es un lugar estremecedor al que se mira desde el exterior. En LOS EXTRAÑOS ocurre lo contrario. Estamos dentro de la casa y miramos al exterior".

La casa se construyó en un antiguo almacén convertido en plató en Florence, Carolina del Sur. El proceso duró ocho semanas: dos para diseñarla, dos para hacer los planos y cuatro para edificarla.

El equipo del diseñador de producción construyó y preparó el interior de una casa de unos 180 metros cuadrados donde se rodaría durante varias semanas. Durante la construcción, John Kretschmer trabajó en conjunción con Bryan Bertino y Peter Sova, el director de fotografía. Dice: "La cámara de Peter debía poder moverse libremente para que Bryan consiguiera todas las tomas que le apetecieran. Quería que el público estuviera ahí mismo, con los personajes. El interior era flexible, todas las paredes eran movibles".

La admiración que siente Bryan Bertino por el cine de los setenta no sólo influyó en el guión, sino en los decorados. Quería que la segunda residencia de los Hoyt tuviera tonos cálidos, que diera la impresión de comodidad. El diseñador de producción dice: "Es el tipo de casa en la que Bryan, yo mismo y muchas otras personas crecimos, un lugar seguro y cómodo lleno de recuerdos. La agradable atmósfera de la casa hace que la película sea aún más aterradora".

El exterior de la casa también se basa en los años setenta. "Bryan y yo conocemos bien las casas tipo ‘rancho’ tan de moda en los setenta", dice el diseñador. "Él creció en Tejas y yo, en Carolina del Norte, donde había muchas".

Se encontró una casa de ladrillos construida en los setenta en Timmonsville, a unos 16 kilómetros de Florence, donde estaba el plató. El director dice: "Era perfecta. Está ubicada en un barrio residencial, pero se queda bastante aislada en invierno, la época en la que se desarrolla la acción".

La casa reunía los requisitos especificados en el guión: un garaje, un camino, árboles grandes y un pajar. Sólo fue necesario añadir un porche trasero con las puertas correderas de cristal típicas en los años setenta.

Las escenas correspondientes a los flashback, en las que se ve a Kristen y a James en la boda, se rodaron en barrios residenciales de Florence y en el Hilton Garden Inn.

La película se rodó casi en orden cronológico. El tiempo, en general, fue clemente a pesar de que la lluvia les obligó a volver a filmar algunas escenas. Bryan Bertino dice: "Hubo que hacer algunos cambios por culpa de la lluvia. También hubo que volver a rodar algunas tomas por el barro, pero a menudo descubrimos que el resultado era exactamente lo que buscábamos".

El actor Kip Weeks añade: "Los elementos meteorológicos se convirtieron en parte de la historia y de nuestras interpretaciones. Todo era más natural. De verdad corríamos por el barro, no era necesario actuar".


Luchar o escapar: Los requisitos físicos del rodaje
Los dos actores principales tuvieron que sufrir mucho más que el trío de intrusos. "Fue un papel agotador, emocional y físicamente", dice Liv Tyler. "Toda película tiene un par de días duros, pero en este caso fueron dos meses. Es la película más agotadora que he hecho".

Aparte de los arañazos y cardenales reales, la actriz acababa cubierta de sangre falsa y de tierra. "Llegaba cada mañana a rodar recién duchada y al cabo del rato estaba hecha un asco. No sabía que tuviera la energía para aguantar esto. Cuando acabó el rodaje, estaba rota".

Además de ensuciarse, los actores tenían que correr. Liv Tyler dice: "Creo que corrí un par de kilómetros cada día. Scott y yo siempre estábamos sudados, sin aliento".

Bryan Bertino dice: "Hablé con Liv de los requisitos físicos del papel. Su entrega es admirable. Peor aún, se pasa toda la película descalza. Tenía los pies machacados y muy a menudo me arrepentí de no haber puesto en el guión: ‘Kristen lleva zapatillas’".

Aunque los actores deben correr, arrastrarse y esconderse, según el coordinador de especialistas Cal Johnson: "LOS EXTRAÑOS no es una película con muchos especialistas. Aun así, hicimos todo lo posible para proteger a los actores y a sus dobles".

Como en cualquier película de terror que se respete, la protagonista de LOS EXTRAÑOS debe gritar. El director recuerda, riendo: "Liv es asombrosa gritando. Decidimos que no ensayaríamos los gritos. La primera vez que debía gritar, yo tenía los dedos cruzados, y lanzó un grito tremendo. Nos quedamos atónitos".

Scott Speedman añade: "Bryan rodó las escenas más emocionales con dos cámaras para no tener que repetir tanto. En los momentos más tensos, no es bueno repetir una y otra vez. Además, Bryan no tenía inconveniente en que añadiéramos detalles que no estaban incluidos en el guión".

Los actores que interpretan a los extraños también tuvieron la ocasión de llegar al fondo de sus personajes. Bryan Bertino dice: "No damos más información de la que tienen Kristen y James; es decir, ninguna, por lo que el ataque es aún más horrible".

Kip Weeks dice: "Vivimos en un mundo insensibilizado gracias a Internet, la televisión, las guerras, los videojuegos, YouTube. Creo que nuestros personajes han perdido la capacidad de respuesta a la violencia y, más específicamente, a la muerte. Por eso, de un modo demente, intentan recuperar el sentimiento de culpa y de pena infringiendo dolor".

Según Gemma Ward: "Esa gente no tiene mucho que decir. Por primera vez en su vida, quieren dominar y controlar la situación".

Laura Margolis está de acuerdo: "Mi personaje tiene el valor de hacer lo que hace porque lleva máscara. En su vida diaria, no tiene poder, no controla nada. Con la máscara puesta, lo domina todo".


Detrás de las máscaras
El diseño de las máscaras de los tres extraños era tan importante como el diseño de la casa de los Hoyt. El director dice: "Quería un diseño básico, simple, con una imagen reconocible por todos. Cuando se entra en un lugar, miramos a la gente, su expresión, sus ojos. Kristen y James no pueden hacerlo, por eso son aún más vulnerables".

Después de varios intentos, el diseño final de las máscaras de Pin-Up Girl y Dollface fue plasmado en plástico moldeado. La de The Man in the Mask es de algodón. A pesar de ser simples, las máscaras son escalofriantes. Liv Tyler dice: "Nunca me han gustado las máscaras porque no se sabe quién está detrás. Incluso me costó acostumbrarme a ellas".

Scott Speedman está de acuerdo: "Era difícil mirarlas. La mirada parecía muerta, como la de un tiburón. La máscara de Pin-Up Girl es aterradora. Laura se convertía en otra persona cada vez que se la ponía".

Laura Margolis reconoce que interpretar a una chica que disfruta torturando fue una experiencia desestabilizadora: "Carece de sentimientos, es aterradora. No siente ni padece, lo que le permite comportarse así. Para interpretarla, tuve que recurrir a facetas de mí misma que preferiría no haber descubierto".

Sorprendentemente, a ninguno de los tres les pareció difícil trabajar con máscaras. "Es posible construir un personaje a pesar de no enseñar su rostro", dice Kip Weeks. "Pueden emplearse los movimientos, los gestos, todo el resto del cuerpo. La máscara acabó siendo parte de mí e incluso me ayudó a transmitir emociones".

Gemma Ward dice: "Fue liberador. Como modelo, mi primera reacción a la máscara fue negativa. Pero descubrí que me liberaba. Podía ser tan mala y tan aterradora como quisiera, me confería poder".

Bryan Bertino está de acuerdo: "No les pregunté que proceso mental siguieron para construir los personajes enmascarados, pero sí puedo decir que funciona".



Al final del rodaje, los actores y el director reflexionan acerca de la experiencia de haber rodado un thriller.

"Es una historia de amor, un drama y una película de terror todo en uno", dice Liv Tyler. "Tiene muchos elementos y niveles diferentes. Las películas de terror suelen estar basadas en sustos, pero esta no, es totalmente diferente. Pasar miedo de verdad y demostrarlo no sólo sorprende a los demás, también me sorprendió a mí".

El actor Kip Speedman añade: "Lo que ocurre en esta película podría pasarnos a cualquiera. El realismo es aterrador. En esta película, el espectador tiene la oportunidad de conocer a los protagonistas antes de que se desate el horror".

En cuanto a lo que espera de este proyecto, que empezó de noche hace varios años, el director y guionista Bryan Bertino dice: "Hoy en día, en muchas películas, el espectador se siente distanciado de la historia porque nunca le pasaría a él. Eso no ocurre en LOS EXTRAÑOS".