Él llega a casa al amanecer, a la hora que ella saca la basura. Ella pasa la aspiradora mientras él intenta dormir. Él empieza a tocar el piano cuando ella acuesta a los niños. Son vecinos pero viven en mundos muy distintos.

Ella es Dorine, la portera del edificio, y reparte su tiempo entre un marido inexpresivo, sus cuatro hijos, más otro en camino, y los culebrones que echan por la tarde en la televisión.

Él es Louis Le Bison, un hombre de alrededor de treinta años, algo brusco en sus maneras. Vive deprisa y lo ha visto todo. Cuando el marido de Dorine la abandona por otra mujer la vida de los dos da un giro inesperado.