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La isla de los monjes cartel reducidoLa isla de los monjes(De terugkeer van de monniken op Schiermonnikoog)
Dirigida por Anne Christine Girardot
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Premio al mejor Documental en los Festivales Internacionales de Dakha (Bangladesh); el Religión Today (Turín) y fue nominado en la misma categoría en el Festival de París y el Nothem Film Festival de Holanda.


La directora (Anna Christine Girardot 1970, Francia)
Reubicada en Holanda. En 2005 fundó junto con John Gruter, la productora Nachtzon Media (Night Sun Media) con la que han hecho numerosos trabajos para la TV pública holandesa.

Anne Christine creció en Francia y ha estudiado en Madrid y Paris (interpretación). En 1991 dio un vuelco a su carrera y se fue a Bogotá (Colombia) donde inició nuevos estudios.

Descubrió que estaba mucho más interesada en grabar y dirigir que en la traducción. Vivió dos años en Sudamérica trabajando y aprendiendo diferentes aspectos de la producción de Cine y TV.

En 1993 continuó sus estudios para convertirse en directora de Cine en Dallas (USA).

Posteriormente encontró su primer trabajo como directora en Hilversum (Holanda).

Anne Christine está casada y tiene cuatro hijos.

Filmografía como directora
Anne Christine trabaja desde 1993 como directora y ha producido numerosos programas de TV, entrevistas, cortos documentales, clips y animaciones para niños y adultos .

La Isla de los Monjes es el primer largo documental de Anne Christine's. Cortometraje Sin Perdón 14' (2016) Serie The Coffin (desde 2009 en la TV Nacional, 130 episodios) Series Documentales (3 episodios) sobre la vida del apóstol Pablo (2016) Documental Tiempo para Morir (2016).


Declaraciones de la directora (Una mujer entre los muros de un monasterio de monjes)
Tengo una tía que fue monja carmelita. Vivía en los Alpes, en un convento que parecía un auténtico paraíso, donde permaneció más de 40 años. Era muy feliz. Pero enfermó y tuvo que dejar su austero convento para integrarse en otro más confortable. Murió dos años después.

Cuando me enteré de lo ocurrido y me imaginé lo que la mudanza debió de significar para ella después de toda una vida, me vinieron inmediatamente las ganas de hacer una película sobre su historia. Pero en su convento llevaban una estricta observancia y supe que sería imposible "colarme" entre sus muros.

Años después me enteré que los monjes cisterciences que viven cerca de mi casa querían vender su gran monasterio (construido inicialmente para acoger 120 monjes y en el que hoy vivían únicamente 8) para empezar una vida nueva de silencio en una isla aislada del norte del país. El coraje y atrevimiento de esos monjes me conmovió, pero sobretodo me imaginé que conocerían los mismos dilemas, las mismas dudas, el mismo dolor que supone soltar la riendas de tu vida, la seguridad y el lugar que escogieron para el resto de su vida, del mismo modo que le debió de suceder a mi tía.

Aunque hoy en día nos resulta difícil ponernos en los zapatos de un monje, sus problemas en este caso me parecieron universales: todos tememos abandonar nuestras seguridades para seguir un sueño, una vocación, un camino...

El primer contacto con los hermanos me impresionó mucho. ¿Sería posible que me dejaran entrar en lo más íntimo de su vida y en un momento tan complicado? Los monjes no están acostumbrados a que alguien externo se meta en su día a día, y ni mucho menos con una cámara. La primera vez que les vi me recibieron todos en círculo, en el comedor inmenso del monasterio. Me sentía perdida. Pero les pude explicar cuál era mi motivación para querer contar su historia. Me escucharon atentamente, sentí todos los ojos fijados sobre mí (las personas ya no escuchan de este modo) y una semana después me dieron su beneplácito.

Los primeros días me sentí como 'caminando sobre huevos'. Pero el abad me dio un consejo muy importante: "Ten paciencia. Abre la mano y espera que las aves vengan a comer sobre tu palma". Y así fue. Poco a poco, todos se fueron abriendo, me dieron toda su confianza y me permitieron entrar en la intimidad de su vida con Dios.

Espero que La Isla de los Monjes comunique un mensaje de esperanza. No temas, aunque tengas la impresión que la causa está perdida, no tengas miedo. La historia de estos monjes es una prueba de que es posible. Si no crees en Dios, cree en tus propios sueños y en tu propia fuerza.

La gente en España está sufriendo en este momento a nivel interno por la división. Espero de verdad que esa película traiga algo de esperanza.

Anne Christine Girardot


El abad nos cuenta
Nuestra comunidad, recibe constantemente peticiones de filmar, fotografiar o hacernos entrevistas prácticamente cada mes. La mayoría de las veces decimos 'no' para preservar la tranquilidad y calidad de nuestras vidas. Pero la petición de Anne Christine tenía un tono diferente, lo que provocó que tuvieramos curiosidad por conocerla y hablar en profundidad con ella. Tras nuestra conversación quedó claro que nuestra respuesta debía convertirse en un 'sí'. ¿Por qué exactamente? La respuesta era sencilla: colaborar con esta película suponía profundizar en nuestra búsqueda en lugar de molestarla. Al vernos obligados a abandonar nuestro monasterio, no sólo tratamos de encontrar un lugar donde continuar viviendo nuestra vocación cisterciense, también nos preguntamos qué significa hoy en día ser monje. Anne Christine lo entendió. Además, contábamos con otro aliciente : podríamos alejar fácilmente al resto de medios si pudiéramos decir que ya nos habían grabado y entrevistado.

Participar en La Isla de los Monjes no nos decepcionó. Las preguntas que nos iba formulando Anne Christine y nuestras conversaciones con ella nos abrieron los ojos y sin duda nos ayudó mucho en nuestro proceso de cambio.

No conocemos mucho sobre el mundo del cine y no teníamos ni idea del público objetivo de la película. Pero hemos visto que esta cinta ha desencadenado toda una corriente de reacciones positivas. La gente se reconoce a sí misma en nuestra búsqueda y encuentra una percha para hablar de lo más profundo se sí mismos, algo que parece ser que la mayoría de las personas tienen guardado en algún rincón a la espera de salir a la luz tras un barbecho.