
Música, vida nocturna y estilo en el cine español
Abundan las películas españolas que suponen un testimonio de la cultura musical, noctámbula y de ocio de su época.
España es un lugar mundialmente conocido por su noche, por más que ahora, al menos en las épocas invernales, haya irrumpido un tardeo con menos propensión a la nocturnidad y todo lo que conlleva.
Históricamente el cine español ha sido un excelente reflejo de esa nocturnidad muy emparentada con la música.
Espacios nocturnos: bares, tablaos, discotecas y casinos
España experimentó unos dorados 80, que supusieron una liberación y una ola de modernidad representada a la perfección por la 'movida madrileña', cuyo espíritu abanderaron las películas de Almodóvar de esa época, pródigas en escenas en bares, algunas tan icónicas como las de Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón.
La banda sonora de esa era suena con fuerza en este cine, aunque tiene más protagonismo todavía en los tableaux musicales que Saura fue conformando a partir de los 90, con una escenografía también muy característica, de marcado aire noctámbulo, el ambiente más propicio para el despliegue de una música como el flamenco en su hábitat natural de los tablaos.
Dentro de ese ecosistema nocturno, no podía faltar un elemento como el juego y los casinos, presentes desde fechas tan remotas como los años 40 en un director español universal como Luis Buñuel, en su filme Gran Casino, correspondiente, eso sí, a su época mexicana.
Aunque la película española que mejor refleja el mundo de los casinos es The Pelayos de 2012, una obra coral que recoge las vicisitudes de una familia que hacía saltar la banca con métodos dudosos, y que más allá de su trama muestra un fresco que refleja la estética fascinante de estos grandes templos del juego.
Cabe destacar que ese brillo también está presente en el medio digital actual, con plataformas de gambling que ofrecen diseños de juego limpios, una ambientación suave y muchos detalles estéticos dorados. Para contemplar todo ese universo visual, puedes consultar algunos de los principales casinos online en España, como los analizados aquí.
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Noche, juego y casinos en otras películas españolas
El cine español también ha sabido explorar la relación del juego con los fantasmas personales en títulos como Juego de Luna (2001), una película de Mónica Laguna que se adentra en el universo del póker, estando ambientada en salas de juego y casinos con estética nocturna, que se endurece cuando se aproxima al ecosistema de las partidas clandestinas. El filme en este aspecto tiene muchos nexos comunes con una obra maestra como Intacto (2003) de Juan Carlos Fresnadillo, el director de 28 Semanas Después, que aquí hace una aproximación de calado al fatum y los inexorables designios del azar que impone una ley de hierro a cada personaje.
Una perspectiva mucho más ligera ofrece una película anterior en el tiempo, La Vida Sigue Igual (1969), dirigida por Eugenio Martín y protagonizada por un jovencísimo Julio Iglesias interpretándose a sí mismo. La película se rodó en algunos de los escenarios más glamurosos de la recién desarrollada La Manga del Mar Menor, incluyendo su casino y el célebre Hotel Entremares, símbolos de modernidad turística en aquella época. Además, el filme supone todo un testimonio temprano de la eclosión festiva en la costa española, cuyo magnetismo atrae hoy en día a millones de personas de todo el mundo, con jóvenes ávidos de disfrutar de la magia de grandes clubes y discotecas de lugares como Ibiza.
Precisamente el Gran Casino de La Manga, que en su momento supuso uno de los más importantes de España, emergiendo como un sitio sinónimo de glamour y elegancia, también está presente en la trama de alguna película de cine negro. Si bien, tuvo un mayor protagonismo una comedia ambientada en él como Ya no va más, protagonizada por Antonio Ozores, en lo que supuso un remake del éxito de Los bingueros en 1979.
Por último, aunque se trate de una película gamberra y descacharrante, no podemos dejar de mencionarla por la importancia que tiene la construcción de un casino en su trama. Hablamos de Torrente 5: operación Eurovegas (2014), una aventura del incalificable personaje interpretado por Santiago Segura, embarcado en esta entrega en una misión de sabotaje de, nada menos, el que iba a ser el complejo de casinos más grande de Europa.
Así, vemos que tocando distintos palos, el cine español ha sabido retratar la intensidad de la vida nocturna, ya sea el arte desatado de los tablaos, la liberación de los bares de la movida, el glamour de los casinos pero también la tensión del juego clandestino, sin renunciar tampoco a aproximaciones más desenfadadas como las que acabamos de ver.