La enfermera Floria ejerce su profesión con pasión y rigor en la planta de cirugía de un hospital suizo. Cada movimiento suyo es preciso. Incluso en medio del caos, siempre escucha a los pacientes y acude de inmediato en caso de urgencia… o casi siempre. Porque la realidad cotidiana resulta a menudo imprevisible. Al comenzar su turno, falta un compañero en una planta completa y con demasiados pacientes. Entre la vorágine, Floria atiende tanto a una joven madre gravemente enferma como a un anciano que espera un diagnóstico temido, y hasta a un paciente privado con exigencias desmesuradas. Pero a medida que avanza la noche, su trabajo se convierte cada vez más en una lucha desesperada contra el tiempo.
