Michael Sheen (Frost/Nixon, The Queen [La Reina]), Bill Nighy (las películas de Piratas del Caribe [Pirates of the Caribbean], Love Actually), Kevin Grevioux y Steven Mackintosh repiten sus respectivos papeles como el señor de los vampiros y el licántropo rebelde, con Rhona Mitra (Doomsday – El día del juicio [Doomsday] y la serie de televisión Boston Legal) que se une al reparto como la impetuosa guerrera vampira, Sonja. Patrick Tatopoulos (diseñador de las criaturas de las tres entregas de Underworld) hace su debut en la dirección sobre un guión de Danny McBride (Underworld y Underworld: Evolution), Dirk Blackman y Howard McCain (Outlander). La película está basada en los personajes creados por Kevin Grevioux, Len Wiseman y Danny McBride y la historia es de Len Wiseman, Robert Orr y Danny McBride. Los productores son Tom Rosenberg (Million Dollar Baby), Gary Lucchesi (El exorcismo de Emily Rose [The Exorcism of Emily Rose]), Len Wiseman (Underworld, Underworld: Evolution, La jungla 4.0 [Live Free or Die Hard]) y Richard Wright (Underworld). Skip Williamson, Henry Winterstern, James McQuaide, Eric Reid y Beth DePatie son los productores ejecutivos.

El director de fotografía es Ross Emery, ACS (La caverna maldita [The Cave]), la dirección artística es de Dan Hennah (supervisión de dirección artística de la trilogía de El Señor de los Anillos [The Lord of the Rings]), el montaje es de Peter Amundson (Hellboy), el diseño de vestuario es de Jane Holland (30 días de oscuridad [30 Days of Night]), el diseñador de criaturas es de Patrick Tatopoulos (Underworld y Underworld: Evolution) y la música es de Paul Haslinger (Crank, Una noche para morir [Prom Night]).


Acerca de la producción
Cuando Underworld se estrenó en el año 2003, el rico relato de una imaginaria guerra de siglos entre dos razas inmortales cautivó al público de todo el mundo. Los vampiros despiadados y los salvajes hombres lobos regresaron en su secuela Underworld: Evolution, y los espectadores mundiales devoraron su elegante estética visual, sus inquietantes personajes y su acción irresistible.

Ahora Underworld: La rebelión de los Licántropos transporta a los seguidores de la saga a casi un milenio antes, al principio del conflicto épico. Creado por los amigos de toda la vida Len Wiseman y Kevin Grevioux, el filme revela el corazón de los secretos de la eterna batalla de la saga de Underworld. Wiseman, quien dirigió las dos primeras entregas, se ha ocupado de las tareas de producción en esta película, y Grevioux repite por tercera vez en su papel del licántropo violento, Raze. "La historia ha sido siempre la fuerza propulsora de Underworld", dice Wiseman. "En el pasado, hemos tenido destellos de cómo todo había empezado. Ahora, finalmente lo representamos con los ‘Death Dealers", su ejército de caballos y masas de hombres lobos".

Antes incluso de que la primera película fuese rodada, Wiseman y Grevioux crearon una compleja mitología para sus antihéroes, los vampiros y los hombres lobos. "Kevin y yo siempre vimos esto como una trilogía", cuenta Wiseman, este solicitado director de películas como La jungla 4.0 (Live Free or Die Hard). "Se decidió en su momento comenzar en la mitad de la historia en cuanto a su cronología, y es genial poder hacer ahora esa pre-secuela de la que tanto hablamos en un principio".

"Una gran parte de toda la serie de Underworld es que los eventos que ocurren durante los últimos poco más de ocho siglos, es lo que determina lo que ocurre en el presente", explica el productor Richard Wright. "Hay secuencias enteras de la primera película que están dedicadas a contar el pasado. Y en el segundo filme, toda la visita a la guarida del personaje de Tannis, son también ocho minutos que cuentan cosas que pasaron anteriormente".

Grevioux escribió el guión original junto a Danny McBride. "Len quería hacer una película de hombres lobos y me preguntó si se me ocurría alguna idea", cuenta. "Cuando comenzamos a discutir acerca de los personajes y la estructura general de la película, y pensamos: ‘¿Qué tal si hacemos una historia de Romeo y Julieta, donde los hombres lobo están de un lado y los vampiros del otro y le damos a la historia de amor un punto moderno y surrealista?’ También decidimos cambiar la manera en que los hombres lobo y los vampiros han sido percibidos tradicionalmente y nos decantamos hacia unas bases científicas que explicaran su existencia en lugar de la mística tradicional".

Underworld: La rebelión de los Licántropos encuentra el origen de la antigua rivalidad entre licántropos y vampiros, en su remoto comienzo, en una relación prohibida. Lucian (Michael Sheen) es el primer licántropo, una criatura capaz de transformarse a voluntad de lobo a humano y viceversa. Sonja (Rhona Mitra) es una "Death Dealer" e hija de Viktor (Bill Nighy), un poderoso vampiro. "La relación entre ellos desata una revuelta de los licántropos en contra de los vampiros", explica Grevioux. "Todo gira en torno al hecho de que Sonja y Lucian están enamorados. A pesar de que Sonja es hija de Viktor, hay un lazo ingobernable que crece entre ellos. Esto es lo que hace que esta sea un tipo diferente de historia respecto a las dos anteriores".

Por primera vez en la historia de la saga, Wiseman ha entregado su lugar en la dirección a otra persona. Patrick Tatopoulos, creador de las fantásticas y espeluznantes criaturas de la primera película, así como el director artístico de la segunda, fue el elegido para sucederlo. A pesar de que él estaba de acuerdo con la decisión de pasar el mando a alguien que había sido parte integral en la creación de la saga, Wiseman admite que en un principio fue extraño ver a otra persona en el sillón de director. "Veo como pasan las cosas desde un lugar diferente ahora, pero como Patrick y yo tenemos una buena relación y hemos construido esto juntos, la atmósfera entre nosotros está muy relajada".

Tatopoulos ve una cierta lógica en el hecho de que su debut como director sea en Underworld: La rebelión de los Licántropos. Es la primera de las películas que se cuenta, principalmente desde la perspectiva de Lucian. "He creado a los hombres lobo de la primera y la segunda película", cuenta el director. "Así que creo que el hecho de que la historia la cuente un hombre lobo es una gran cosa para mí. Ya hemos visto hombres lobo en el pasado, pero su presencia nunca ha sido abrumadora. En este caso, tenemos una guerra a muerte con multitud de ellos. Esta película le da un nuevo filo a la historia, cosa que me ayudó a crear una diferente textura para el filme".

Bill Nighy, que interpreta al vampiro "mayor" Viktor, acredita la fe de los realizadores en la saga al hacer de Underworld: La rebelión de los Licántropos algo más que otra película de acción con vampiros. "Len Wiseman, Danny McBride y Richard Wright son más que simple entusiastas", dice el actor. "Son creyentes. No están haciendo guiños al público. Se puede hacer una película de vampiros desde el cinismo, pero no creo que se obtenga el éxito que un creyente pueda obtener".

"Ellos aman el mito vampiro y saben sus leyes", agrega. "Me encanta cuando todo se pone estrictamente ‘vampiro’. Me encanta ver a un vampiro bebiendo sangre de forma sofisticada. Las ecuaciones morales se tratan con el mismo respeto con el que se tratarían en cualquier otro tipo de historias".


Una luz sobre el reparto
Los realizadores de Underworld: La rebelión de los Licántropos se entusiasmaron con la posibilidad de reunir al mismo reparto que creó a los inolvidables personajes de esta serie, un conjunto que reúne a numerosos artistas británicos con agendas muy apretadas. "No tenía idea de que podíamos mantener el reparto que habíamos tenido", cuenta Wiseman. "Me ilusionó mucho poder contar con tantos de ellos otra vez".

El guión explica siglos de enemistad entre los adversarios Lucian (Michael Sheen) y Viktor (Bill Nighy) cuyo argumento tiene una vuelta de tuerca que puede trastornar las expectativas de los seguidores. "Porque ambos personajes son muy complejos, fue realmente estupendo resucitarlos para la pre-secuela en un nuevo contexto de su pasado histórico", cuenta Wright.

Sheen, nominado a los premios BAFTA por su trabajo en The Queen (La Reina) con Helen Mirren, ha aparecido como Lucian en las tres películas, llevando al personaje de aparente villano a héroe. "Una de las cosas que Michael siempre aporta a su trabajo es la pasión", dice Tatopoulos. "No hay nada que se le escape, ningún detalle de su personaje, es muy preciso".

Nighy, el coprotagonista, está de acuerdo. "Michael es uno de esos raros actores que entrega interpretaciones con una gran inteligencia y poder. Nadie en la historia del cine ha interpretado a un hombre lobo tan brillante y poderoso como Michael Sheen. Digo esto con completa seguridad".

Después de ver a Lucian morir en Underworld: Evolution, Sheen estuvo agradablemente sorprendido de tener la oportunidad de volver a interpretar a su personaje nuevamente. "Tuve la oportunidad de mostrar una historia de la que oímos hablar en la primera película", dice el actor. "En un principio, piensas que Lucian es el malo hasta que tienes más información acerca de él. La idea de mostrar la manera en que el personaje llegó a ser quien es, es muy atractiva".

Después de interpretar al personaje dos veces en el pasado, Sheen ahora puede explorar otra de sus facetas. "Una de las cosas en las que más estaba interesado de nuestra historia era en la idea de la relación que tiene Lucian con el animal dentro de él", continúa el actor. "Viktor usó a Lucian cuando él era adolescente para crear más licántropos. Lucian resultó tan traumatizado por esta experiencia que reaccionó contra su parte animal, de hecho pasa su vida de pie y matando hombres lobo hasta el momento en que empieza nuestra historia".

"Esto le otorga a Lucian un viaje interior muy intenso. Para encontrar la libertad tiene que aceptar algo acerca de sí mismo que ha evitado durante toda su vida. Esto lleva ligeramente a la historia más allá del mito".

"Lucian también, por primera vez, surge como líder", observa Sheen. "Él es alguien capaz de inspirar hermandad entre gente por quien jamás la había sentido".

El filme también revela una nueva cara de Viktor, el vampiro líder que juega un papel central en las otras dos películas. "Podemos ver porqué Viktor se convirtió en quién era en la primera película", cuenta Wiseman. "Bill aportó una visión de Viktor que es diferente de lo primero que vi escrito en el papel. Él le dio un tono que me encanta y creo que la gente va a disfrutar de su enfoque".

Tatopoulos valora la tremenda inversión de Nighy en su parte. "Nunca sabes lo próximo que va a suceder, pero esperas cualquier cosa", dice. "Bill pasa en un segundo de la sonrisa a una mueca increíble. Ha creado a un personaje que está en el filo del gran guiñol. Lo hace notablemente temible e intrigante".

La larga carrera de Nighy en el escenario, el cine y la televisión han hecho de él uno de los actores británicos más valorado, y él aporta el mismo compromiso al amo de los vampiros que a sus trabajos en el teatro. "Los vampiros, a fuerza de ser vampiros, son fríos", dice el actor. "Y ser el señor de los vampiros me ha dado la oportunidad de ser despectivo y también de ser torturado. Tiene ideas encontradas sobre alguna de las cosas que persigue. Te lleva a creer que tiene sentimientos como todos, pero emocionalmente él está incapacitado. Este es un hombre que bebe la sangre de su hija y organiza que esta sea quemada como una tostada".

La relativa juventud de Viktor en esta película significó pasar menos tiempo en maquillaje. "Tuve que pasarme más de seis horas para colocar las prótesis y el maquillaje para la primera, donde había estado dormido durante cientos de años, literalmente, sin nada de carne", recuerda. "También he tenido la oportunidad de vestir una falda de terciopelo hasta los pies. No es muy frecuente encontrar la oportunidad para esto y es bastante liberador y moderno. Tengo una parte de sangre escocesa, así que es casi legítimo para mí ponerme una falda. No es que lo haga frecuentemente. Lo hice una vez, y me sorprendió lo satisfecho que me hizo sentir".

La actriz Kate Beckinsale dejó una huella indeleble en la saga de Underworld con su intenso retrato de Selene, la ‘Death Dealer’, en los primeros dos capítulos. Rhona Mitra en un principio sentía cierta aprehensión de unirse a una saga que estaba tan asociada con ella, como lo explica Mitra, "otra actriz británica morena. Una vez que entendí que esta era una pre-secuela y un nuevo punto de partida en cuanto a lo que al personaje se refiere, supe que podía forjar algo para mí".

Los realizadores valoran la habilidad de Mitra para capturar los elementos contradictorios en el personaje de Sonja. "Fue muy difícil encontrar a alguien con la dureza que se necesitaba para un ‘Death Dealer’, pero que a la vez tuviera un lado vulnerable", explica Wiseman. "Creo que es muy difícil de sacar lo que con tanta destreza Rhona ha logrado".

El personaje a Tatopoulos le recuerda en muchas cosas a Selene. "Sonja para mí es el arquetipo para Selene", dice el director. "Sonja es una guerrera, pero hay algo muy frágil en ella. Definitivamente, ella es una luchadora fuerte, pero también tiene una gran carga emocional. Y se puede convertir en alguien muy sensible".

Interpretar a una vampira asesina es una experiencia totalmente nueva para Mitra. "Este es un punto de partida totalmente diferente a cualquiera de los papeles que haya interpretado", cuenta la actriz. "Ella tiene un poder increíble. Es una mujer muy pasional que expresa todas esas cualidades que tiene un guerrero, pero también esa maravillosa feminidad. Es un papel muy seductor y tentador".

A pesar de que ella es una recién llegada a la saga, Mitra dice que sus compañeros de reparto la hicieron sentir cómoda de inmediato en el plató. "Nunca antes había trabajado con Bill o Michael. Bill es una estrella de rock por propio derecho. Él se ofrece entero al mundo de los vampiros, de una manera tan brillante y con tanta gracia… Y la preparación de Michael para el papel fue realmente ejemplar. La gente siempre dice, ‘qué afortunada soy, fue un verdadero honor’, pero de verdad lo fue. El listón estaba alto y realmente tuve que subirlo para la ocasión".

Cuando Kevin Grevioux creó el complejo universo de Underworld, se aseguró de incluir una jugosa parte para él mismo: el teniente de Lucian, Raze. En Underworld: La rebelión de los Licántropos, él tiene la oportunidad de explorar el origen del personaje. "En esta historia, finalmente vemos cómo fue que llegó a ser un licántropo y cómo se originó la especial relación que tiene con Lucian", dice Grevioux. "Raze era alguien en quien Lucian confiaba, un humano poderoso entre los esclavos, que es el porqué Lucian lo quiere en su familia de licántropos".

Steven Mackintosh interpreta otra vez a Tannis, el archivista vampiro. "No estaba creando a un personaje de la nada", dice él. "Pero había una diferencia. La encarnación temprana de Tannis es diferente. En el momento que lo encontramos en Evolution, él ha estado escondiéndose por un tiempo largo y está viviendo una vida de derroche. Lo comparo con el Hugh Hefner del mundo vampiro en ese momento".

El conjunto del reparto reunido nuevamente se adaptó rápidamente a su nuevo director. "Patrick no ha tenido nada de ego", dice Sheen. "Y ha sido genial verlo disfrutar de su rol en esta película y haciéndose cargo de todo. Y por supuesto, él aportó su brillante sentido visual al filme. Se ve increíble".

El veterano actor Nighy también habla de forma excelente de Tatopoulos. "No tengo palabras suficientes para Patrick, él fue absolutamente brillante. Dejé de pensar en él como un director debutante a la mitad del primer día. Fue impecable y cortés sin límites. Es encantador, inteligente y agudo; y su experiencia en el campo artístico y en la creación de efectos especiales para criaturas resultó muy útil".

Mitra concuerda, "lo que fue maravilloso es lo mucho que estaba en contacto con su equipo. Eso creó un ambiente feliz en el rodaje. Se respetaba a todo el mundo. Creo que su nivel de humildad ha sido evidente junto con su capacidad de escuchar lo que la gente quería y necesitaba".


Trajes, criaturas, criptas y castillos
Desde el principio las películas de Underworld se definieron por su arriesgado estilo visual que se reflejaba en todos los aspectos de los filmes, desde el vestuario y los decorados a la fotografía. En Underworld: La rebelión de los Licántropos, los realizadores han reinventado la firma de la saga con pequeñas y grandes innovaciones que reflejan el alcance épico del filme.

Después de considerar en un principio Rumania, el hogar tradicional de los vampiros, como localización, los realizadores se decidieron por rodar en Nueva Zelanda, un país con una infraestructura para rodar renovada gracias a películas como la trilogía de El Señor de los Anillos (Lord of the Rings). Los asombrosos paisajes de Nueva Zelanda y la exhuberancia de sus verdes bosques fueron el marco perfecto. "Mi primera reacción fue que Nueva Zelanda era demasiado bella", dice Tatopoulos. "Es demasiado magnífica, demasiado verde. No podíamos hacer nada malvado allí. Pero en nuestro primer viaje de reconocimiento vimos el bosque de Woodhill Forest, que parece un bosque muerto. Cuando vi esto, supe que sería genial".

En vez de simplemente recrear los colores oscuros, los azules poco saturados y los melancólicos interiores de las primeras dos películas de Underworld, el director de fotografía Ross Emery le aportó una nueva profundidad a la imagen. Dado que la historia transcurre en un pasado lejano, los misteriosos tintes azules y verdosos han sido revestidos por una imagen dorada, pulida, que le da a la película una sensación de época. "Los primeros filmes tienen accesorios muy modernos, como luces fluorescentes, pero nuestro mundo de ahora es uno con velas, braseros y luz de luna", cuenta Emery. "Esto le da una luz mucho más cálida. Fuimos en realidad por los amarillos, los bronces mezclados con algunos verdes para complementar el musgo y los líquenes de las localizaciones exteriores".

Y por primera vez la historia se mueve hacia la luz diurna. Este es un punto narrativo crucial, como lo explica el productor Wright. "El personaje de Lucian se desarrolla en varios sentidos en esta película, y uno de ellos es salir del castillo, finalmente liberarse del dominio de la noche. Cuando sale y entra en el mundo de cielos azules y verde, es un gran momento. De repente el color entra en el mundo".

Underworld: La rebelión de los Licántropos es la primera de la serie en ser rodada en alta definición. "Para este tipo de película, el HD funciona a la perfección", dice Emery. "Es un filme en verdad muy oscuro porque los vampiros solo salen de noche. Tuvimos solamente un par de semanas de exteriores en toda la película. En este tipo de ambientación, el HD funciona genial".

El HD también permitió a Emery manipular la velocidad de la acción para las secuencias de lucha y para realzar ligeramente a los hombres lobo. "Descubrimos que los hombres lobo se veían mucho más amenazantes y violentos cuando eran rodados con un obturador de 45º. Todos sus movimientos se veían más agresivos y destacaban más", dice Emery. "Me encanta el HD porque puedes ver en el set cómo va a quedar la película. No tienes que imaginar cómo va a quedar todo después de graduarlo y todo lo demás. Para una persona visual como Patrick, esto es fantástico porque pudo ver en los monitores cómo la película se iba a ver finalmente en la pantalla. Esta fue una tremenda herramienta para todos en el equipo, porque podían hacer los ajustes necesarios".

Emery dice que el departamento de arte es el responsable de haber hecho su trabajo más fácil. "Todo lo que tenía que hacer era llegar al plató y encender las luces. Todo estaba increíblemente detallado y los artistas en el plató, la gente de la construcción de decorados, los decoradores, todos hicieron un trabajo fantástico. Hace mi trabajo mucho más fácil cuando entras en el set y, literalmente, todo lo que tienes que hacer es poner la cámara, se ve fantástico".

El diseñador artístico Dan Hennah es el ganador del Oscar® por la dirección artística de la trilogía de El Señor de los Anillos (Lord of the Rings). "Uno de los valores agregados de este trabajo fue trabajar con un director realmente visual", dice Hennah. "Viniendo del área de la dirección artística y de la creación de criaturas, Patrick pudo ver lo que quería y eso es siempre de mucha ayuda".

Tatopoulos insistió en que el diseño artístico de la película evitara las convenciones góticas del género de vampiros. "El filme transcurre en un período pre-gótico", continúa Hennah. "La mayor influencia fue la arquitectura georgiana, la arquitectura en piedra de las fronteras de Rusia y la bizantina con influencia turca. ¡Supongo que es una especie de fumadero de opio!".

Tatopoulos quería que el decorado principal, el castillo, fuera una estructura inmensa cavada en la roca y que se cerniera ominosamente sobre los personajes. Mientras que el edificio en sí fue creado a través de CGI, el equipo construyó la muralla en torno al patio y la fachada del castillo que es donde la mayor parte de la acción transcurre. La construcción llevó ocho semanas en un inmenso depósito-estudio en el sur de Auckland y se necesitó un equipo de cientos de carpinteros, pintores y yeseros.

"Es un entorno clandestino", dice Hennah. "El concepto era que los vampiros se habían apoderado de un viejo castillo o monasterio extraído de la roca y lo convirtieron para su uso. Esto en cuanto a los esclavos y a la construcción".

La puerta del castillo está adornada con calaveras, una referencia a la antigua práctica de exponer públicamente cabezas cortadas como aviso para los enemigos y los transgresores. El motivo de la calavera también está cincelado en la cara de la roca sobre el patio, junto a esculturas que recuerdan al arte ruso georgiano y símbolos celtas.

La mayor creación de Hennah es la cripta, una imponente habitación circular que fue pintada simulando intrincados mosaicos de rico oro, amarillos, verdes y rojos. "Si no está pintada de la manera adecuada, no es creíble", dice Tatopoulos. "Y las terminaciones en los decorados tenían un nivel alucinante".

El vestuario ha sido un elemento de estilo crítico en cada entrega de la saga de Underworld. Para Underworld: La rebelión de los Licántropos, los diseñadores crearon un look nuevo y único. Los realizadores querían algo para Sonja que tuviera un estilo guerrero pero a la vez sexy, además de práctico para las secuencias de acción. Wendy Partridge, quien diseñó el vestuario para las dos primeras películas de Underworld, realizó un traje con unas botas hasta los muslos, un corsé de cuero y una armadura con una cota de malla para las escenas de lucha.

"No sé si alguien en realidad ha visto algo parecido a esto", dice Mitra. "Es otro nivel en términos de vestuario. Cómo algo puede verse tan increíblemente masculino pero al mismo tiempo tan atrevido es un misterio. Fue una pesadilla para ponerlo pero creo que valió la pena, porque cada vez que salía de mi rulote, sentía, ‘soy este personaje’".

La diseñadora Jane Holland creó el vestuario para el resto del reparto. Para Holland, trabajar con Tatopoulos fue uno de los grandes placeres de su carrera. "Tenía un sentido muy fuerte en cuanto hacia dónde estábamos yendo en el aspecto visual", explica la diseñadora. "Él era capaz de expresar sus ideas y puede dibujar muy bien y rápido. Obviamente él tenía una imagen muy definida en su cabeza, pero estaba abierto a las cosas que le propusimos".

"Hicimos muchas cosas de forma artesanal, mucho trabajo en cuero, en metal, algunas bellas prendas hechas a medida y muchas terminaciones a mano", continúa. "Es muy excitante hacer esto y es genial cuando tienes a alguien que aprecia los detalles".

Después de consultar con Tatopoulos, Holland trabajó con un concepto que combina referencias de historia medieval y pura fantasía. Para los miembros del consejo de vampiros, Holland creó unos diseños opulentos y decadentes en ricas telas como el terciopelo, mientras que los esclavizados licántropos iban vestidos con jirones de cuero y los personajes de los humanos llevaban trajes de arpillera.

"La imagen que Patrick tiene de los vampiros es que son pulcros y contenidos, capaces de moverse con rapidez", explica Holland. "Trabajé con esa silueta. Terminaron siendo muy ‘sastre’. Porque estábamos tratando con la noche y con una gama oscura, utilizamos mucho negro y colores oscuros. Utilizamos cuero y texturas que atraparan la luz".

Los cuatro trajes de Viktor incluyen su firma, una larga levita de cachemira negra con un vistoso bordado en el cuello, los bajos y los puños. También lleva un chaleco de cuero, tabardo y falda, una ornamentada armadura y un yelmo.

Lucian y los demás esclavos fueron vestidos con cuero gastado y envejecido, como si fuera una segunda piel. Pero era lo suficientemente flexible como para permitir el máximo de movimiento a Michael Sheen durante las escenas de lucha.

"Hacen mucho de tu trabajo por ti", dice Steven Mackintosh acerca de los trajes. "Cuando entras en el set con esa ropa y ves un inmenso hall o patio con antorchas que flamean y portalones y rastrillos y cámaras de tortura y mazmorras, hace que el elemento visual de este filme sea fantástico. Describiría mi vestuario como una mezcla entre Ricardo Corazón de León y Black Sabbath, lo que creo que es un valor agregado. Es medieval pero también es rock & roll".

Underworld: La rebelión de los Licántropos contiene numerosas escenas de acción de alto voltaje, incluyendo el duelo cuerpo a cuerpo entre dos poderosos vampiros, un encuentro sangriento entre los Death Dealer y los hombres lobo y una batalla épica entre vampiros y licántropos, que culmina en un cara a cara entre Viktor y Lucian.

Para poder preparar a los actores para el desafío de las numerosas escenas de acción que tenían, el coordinador de dobles y escenas de acción Allan Poppleton entrenó exhaustivamente con ellos antes y durante la producción.

Michael Sheen se preparó durante varias semanas para el papel. "Disfruto de la pelea de espadas y cosas como esas, así que me dio la oportunidad de hacer todo ese tipo de cosas. Siempre me consideré un actor muy físico y trato de brindarle a mi personaje todo lo que puedo. Y dado que en ciertas partes del filme llevo puesto casi nada, cuanto más saltaba cuando hacía frío, ¡mucho mejor!"

La pelea entre Viktor y Sonja fue rodada en el decorado del patio del castillo mientras una máquina de lluvia creaba una violenta tormenta. "Nos pasamos casi toda la semana peleándonos en la lluvia con espadas y lentes de contacto", recuerda Mitra. "Cada vez que mirabas hacia arriba el agua entraba en los ojos y las lentes de contacto se daban vuelta".

"Era difícil trabajar en la lluvia con mi traje", agrega. "La cota de malla era como un rallador de queso en mis brazos. Todo estaba empapado, húmedo, parecíamos ratas mojadas, ¡tratando de que se nos viera desafiantes y sexy!"

Tatopoulos describe la secuencia final como una batalla entre clanes en donde las apuestas están al límite y los luchadores pelearán a muerte. La combinación de criaturas de animatronic, los intérpretes y el CGI, que fue utilizado para aumentar el volumen de hombres lobo y licántropos, crearon un enfrentamiento de pesadilla entre la artillería superior de los vampiros y la innata ferocidad de los hombres lobo.

Como Tatopoulos viene del mundo de las criaturas, utilizó todos los artilugios de animatronic posibles y contó con el CGI para amplificar los efectos. "Fue un gran desafío", recuerda el director. "Tuvimos que crear un sentido de inmensidad de lucha cuando en realidad teníamos cuatro licántropos y cuatro hombres lobo. Sólo dos de ellos eran mecánicos, lo cual significa que eran los que se podían mover en el plano".

"Me encontré encuadrando planos alrededor de las criaturas que realmente se podían mover", cuenta el director. "Soy un gran defensor de las criaturas mecánicas, pero también hay que dejar un poco de espacio para el CGI, que en alguna medida es más controlable. Creo que encontramos el balance justo".