La distancia es la historia de un robo que mezcla el género del suspense con la ciencia ficción, utilizando toques de humor surrealista para llegar a un compromiso fílmico intrigante y subversivo.

Vasiliy Lébedev, era un joven campesino de Crimea, que decidió ir a trabajar a Siberia en unas minas de carbón. Con su sentido de la oportunidad, su falta de escrúpulos y aprovechando la oportunidades del final de la Perestroika, consiguió rápidamente hacerse un lugar en el alto mando de una de las más importantes Centrales Térmicas de Siberia. Después de la caída de la antigua URSS y gracias a su astucia, se convirtió en el único propietario de la Central Térmica y dueño de uno de los mayores yacimientos de carbón de Rusia, acumulando una inmensa fortuna.

Personaje introvertido y amante de las ciencias paranormales, viajaba constantemente obsesionado en encontrar pistas sobre la existencia de “Ovnis” y descubrir puertas hacia el “mas allá”.

En uno de sus últimos viajes a EEUU compra una performance de un conocido artista austriaco, al propio artista y a su coyote (parte imprescindible de la pieza). Transportándolos posteriormente, de forma secreta e ilegal a Rusia y encerrándolos en una nave en el exterior de su Central Térmica ya en desuso, de Siberia. Tras la muerte de Vasiliy, el artista sigue confinado en la Central Térmica y custodiado por un extraño guarda. Los años van pasando y el artista se pondrá en contacto con tres enanos con poderes sobrenaturales y les encargará que planifiquen y roben algo que denomina “La Distancia”.