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Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos cartel reducidoShang-Chi y la leyenda de los diez anillos(Shang-Chi and the legend of the ten rings)
Dirigida por Destin Daniel Cretton
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Shang-Chi y la leyenda de los Diez Anillos está dirigida por Destin Daniel Cretton y producida por Kevin Feige y Jonathan Schwartz, con Louis D’Esposito, Victoria Alonso y Charles Newirth como productores ejecutivos. David Callaham y Destin Daniel Cretton y Andrew Lanham escribieron el guion de la película, que se estrena en cines el 3 de septiembre de 2021.

“'Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos' cuenta la historia de un joven que se da cuenta de que su padre es uno de los mayores criminales del mundo”, dice Kevin Feige, productor, “Shang-Chi tiene que asumir y lidiar con la situación para poder superar y dejar atrás esa terrible realidad. Debe encontrar el heroísmo necesario para liberarse del legado de su padre. Pero todas las historias tienen muchas facetas. En nuestra película, la percepción que tiene del mundo de su padre y la imagen que tiene de él resultan ser más complejas de lo que Shang-Chi había creído en un principio. Esa era la historia de fondo que queríamos explorar”.

La película también está protagonizada por Awkwafina (“Crazy Rich Asians (Locamente millonarios)”, “Oceans 8”); Meng'er Zhang en su primer papel en el cine; Fala Chen ("The Undoing", "Sound of the Desert" de HBO); Florian Munteanu ("Creed II: La leyenda de Rocky", próximo estreno de "Borderlands”); Benedict Wong (“Dr. Extraño (Doctor Extraño”, “Vengadores: Endgame”); Yuen Wah ("Kung Fu Sion", "Australia”); Ronny Chieng (“Crazy Rich Asians (Locamente millonarios)”, “Bliss”); Zach Cherry ("Spider-Man: Homecoming", "Perturbada”); Dallas Liu ("PEN15", "Underdog Kids”); con Michelle Yeoh (“El mañana nunca muere”, “Tigre y dragón”); y Tony Leung (“Deseando amar”, “The Grandmaster”).

"Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos” de Marvel Studios está producida por Kevin Feige y Jonathan Schwartz, y dirigida por Destin Daniel Cretton (“Cuestión de justicia”, “El castillo de cristal”, “Las vidas de Grace ( Short Term 12)”). Louis D'Esposito, Victoria Alonso y Charles Newirth son los productores ejecutivos. El guión es obra de Dave Callaham y Destin Daniel Cretton y Andrew Lanham, y Dave Callaham y Destin Daniel Cretton han adaptado la historia para la pantalla.

El equipo creativo del director Cretton incluye al director de fotografía Bill Pope (“Trilogía de Matrix”, “Spider-Man 2”); la diseñadora de producción Sue Chan (“Shirley”, “El Congreso”); los montadores Nat Sanders, ACE (“Moonlight”, “Cuestión de justicia”), Elísabet Ronaldsdóttir, ACE (“John Wick (Otro día para matar)”, “Atómica (Atomic Blonde)”) y Harry Yoon, ACE (“Minari. Historia de mi familia”, “Euphoria”); la diseñadora de vestuario Kym Barrett ("The Amazing Spider-Man", "Tres reyes”); el supervisor de efectos visuales Christopher Townsend (“Vengadores: La era de Ultrón” de Marvel Studios, “Guardianes de la Galaxia Vol. 2”); con música de Joel P West (“Cuestión de justicia”, “El castillo de cristal”).

"Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos" de Marvel Studios se estrena el 3 de septiembre de 2021 en los cines de Estados Unidos.


Ha nacido un nuevo héroe
Con el estreno de "Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos", Marvel Studios lanza su nuevo Superhéroe al Universo Cinematográfico Marvel en constante crecimiento y evolución.

Shang-Chi era un personaje bastante oscuro creado por Marvel Comics en los años 70. Cuando el equipo creativo de Marvel, dirigido por los productores Kevin Feige y Jonathan Schwartz, profundizó en los cómics de hace más de 40 años, ambos encontraron una inmensa fuente de inspiración.

“Es cierto que hay mucha acción e imágenes increíbles -algo que esperarías de Marvel en los años 70-, Shang-Chi necesitaba una actualización significativa”, dice el productor Jonathan Schwartz. “En 1973, Shang-Chi cobró vida gracias a los grandes fans del cine de Kung Fu que lo convirtieron en el protagonista de una historia de espionaje y espías. Este género se puso muy de moda después del estreno ese año de la película de artes marciales 'Operación Dragón’. Ahora, más de 40 años después y viendo cómo se cuentan las historias, el personaje de Shang-Chi no encajaba bien con un público moderno. Tuvimos que pensar en cómo queríamos dar vida a ese personaje en una película del Universo Cinematográfico Marvel”.

En esta historia de origen, el Shang-Chi actual tiene una estrecha conexión familiar con la organización de los Diez Anillos. La oscura organización de los Diez Anillos ha sido un elemento subyacente del MCU desde 2008, cuando salió a la superficie para secuestrar a Tony Stark en la primera película de "Iron Man". La persona responsable de la organización de los Diez Anillos apareció subrepticiamente en el estreno de "Iron Man 3" de Marvel Studios en 2013 en la forma del archienemigo de Iron Man, El Mandarín. Este personaje había aparecido por primera vez en los cómics de Marvel en 1964, diez años antes que Shang-Chi. En esta película supimos que quien pretendía ser el Mandarín era en realidad un actor llamado Trevor Slattery, interpretado por Ben Kingsley, que había contratado el líder de los Diez Anillos para hacerse pasar por él y anunciar sus planes.

“Hablamos sobre cuándo llevaríamos a la pantalla al jefe de la organización de los Diez Anillos. Queríamos hacer justicia al personaje y mostrar su gran complejidad", dice el productor Kevin Feige. Y añade: "Eso es lo genial de las etapas del MCU. Podemos hacer una película como 'Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos' y presentar un nuevo héroe al mundo, pero en realidad, el subtítulo tiene que ver con el comienzo del MCU, lo que abre la puerta a explorar la organización de los Diez Anillos y quién es su auténtico jefe”.

En “Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos”, el público conocerá la historia del verdadero líder de los Diez Anillos: Xu Wenwu, el padre de Shang-Chi. El poder de los auténticos Diez Anillos, que están en poder de Wenwu, es lo que le permitió construir la organización criminal de los Diez Anillos.

El productor Jonathan Schwartz era consciente que dar vida a este rincón particular del Universo Cinematográfico Marvel en una gran película de acción con artes marciales iba a ser un primer paso muy importante. “En los cómicos hay una gran riqueza de personajes con temas de artes marciales y todavía no los hemos podido llevar a la gran pantalla”, dice Schwartz. “Shang-Chi era una manera perfecta de entrar en todo ese mundo para dar vida al mundo de las artes marciales de los cómics de la misma manera que 'Dr. Strange (Doctor Extraño)' logró dar vida a la faceta mágica del universo y como lo hizo 'Guardianes de la Galaxia' dando vida a la faceta galáctica del universo”.


El director
Los productores Kevin Feige y Jonathan Schwartz y los productores ejecutivos Louis D'Esposito y Victoria Alonso querían que la película la dirigiera un realizador que supiera extraer la autenticidad y elaborar una historia sobre el pasado de Shang-Chi que atrajera al público. Un historia que maravillara al público y lo transportara a un mundo de Marvel completamente original.

Mientras buscaban por todo el mundo un realizador que tuviese esas características, Jonathan Schwartz llamó al director nacido en Maui Destin Daniel Cretton, que dirigió “El castillo de cristal” y la aclamada “Cuestión de justicia”, ambas protagonizadas por Brie Larson, la actriz ganadora del Oscar®, así como “Las vidas de Grace (Short Term 12)” y “I Am Not a Hipster”.

Schwartz señala: “Creo que antes, Destin hubiera dudado a la hora de dirigir una película de superhéroes, pero cuando supo que Marvel quería un director asiático-estadounidense para dar vida a una historia asiático-estadounidense, la idea le gustó. Se puso en contacto con nosotros y nos dijo que estaba interesado”.

“Nunca creí que me darían el trabajo”, reconoce Cretton. “Pensé que tendría una reunión en la que le diría a Marvel lo que yo creía que podía ser este primer superhéroe asiático, y lo que significaría para mí. Pero también les quería hablar de las trampas que debían evitar”.

El director se sintió aliviado cuando, durante la reunión, descubrió que los productores ya habían pensado en esas trampas. “Querían contar bien la historia que todos los personajes fueran seres humanos multidimensionales”, continúa diciendo Cretton, “para tratar de evitar esos estereotipos que han estado planeando sobre los personajes asiáticos y asiático-americanos desde hace mucho tiempo. Así que fue muy gratificante hablar con ellos en esa primera reunión”.

Cretton, que creció en Hawai, dice que en Halloween solo se podía disfrazar de Bruce Lee, de Rufio de la película "Hook (El capitán Garfio)" y del luchador Ricky "The Dragon" Steamboat. “Esas eran mis tres opciones. Así que me fascinó la idea de hacer el primer superhéroe asiático”.

Después de esa primera reunión hubo otras tres hasta que Cretton hizo una última presentación del proyecto. En su presentación, Cretton hizo hincapié en el tema universal de la relación padre-hijo. “Los conflictos de la relación entre Shang-Chi y Wenwu fue lo que más me interesó”, reconoce Cretton. “Lo que me impresionó de los cómics fue esa compleja relación de un padre que educó su hijo para ser un asesino, y ahora su hijo ha crecido y tiene que enfrentarse a él. Me resultó emocionante, y fue la base de la presentación que realicé para ellos”.

Además fue una presentación muy personal.

“De pequeño, mis amigos eran sobre todo filipinos, chinos, japoneses, de Okinawa”, explica Cretton. “En Hawai, formas parte de la mayoría si eres asiático. Cuando fui a Estados Unidos continental por primera vez, me sentí fuera de lugar. Fue la primera vez que alguien se me acercaba en un bar y me llamaba Bruce Lee. Entonces me di cuenta de que allí 'era diferente'".

En su presentación, esa experiencia formaba parte del periplo de Shang-Chi. Marvel estuvo muy de acuerdo con lo que debía ser la película para él y así fue como Cretton se incorporó al proyecto.

“Durante todo el proceso, Kevin, Jonathan, Louis y Victoria me recordaron continuamente lo que dije en mi presentación. Me encantó hasta donde llegó la historia durante el desarrollo del guion”, comenta Cretton.

El proceso fue enseguida un trabajo de colaboración. Una vez que contrataron a equipo creativo empezó la producción inicial. La diseñadora de producción Sue Chan se incorporó desde el principio mientras Dave Callaham, que es chino-estadounidense, y Cretton desarrollaban la historia y trabajaran en la adaptación. Más adelante, en el proceso de preparación, el guionista Andrew Lanham se unió a ellos para escribir el guión que llegó a la gran pantalla.

“Fue aterrador, pero también muy estimulante desarrollar y diseñar los sets cuando aún no habíamos decidido cómo sería la escena”, reconoce Cretton. “Pero el trabajo de Sue y su equipo así como de Andy Park [el director de desarrollo visual de Marvel Studios] y su equipo, aportaban información al proceso del escritura del guion”.

Y añade: “Nunca había hecho nada igual. Por lo general, escribimos sin nadie más y después incorporamos al resto del equipo. Pero contar con ese tipo de intercambio con otros jefes de departamento ayudó muchísimo a dar forma a la historia”.


Buscando a Shang-Li
Encontrar una identidad cinematográfica moderna para Shang-Chi fue un proceso fascinante y complejo para los realizadores. “Ni el público asiático-americano ni un público más amplio podía identificarse con el Shang-Chi de los cómics porque habían exagerado mucho su faceta exótica”, señala el productor Jonathan Schwartz. “El personaje hablaba sobre todo siguiendo la tradición de las enseñanzas Zen Koan, y no funcionaba bien. Queríamos que pareciera un personaje asiático moderno, alguien que habitaba el mundo que vemos y conocemos”.

Así que el equipo creativo estudió profundamente quién podría ser Shang-Chi, más allá de su apodo no oficial, "el maestro de Kung Fu”. “Shaun solo es alguien que busca su lugar en el mundo”, explica Cretton. “Así que debíamos encontrar un actor capaz de aprender formas increíbles de luchar. Pero también debía ser muy fácil identificarse con él, alguien que emprendiera de manera convincente ese viaje de autodescubrimiento”.

Empezaron a buscar y acabaron encontrando al debutante Simu Liu, el joven actor que iba a encarnar a Shang-Chi.

El periplo de Liu para convertirse en actor comenzó con un trabajo de contabilidad después de la universidad. Cuando Liu perdió el trabajo se presentó para hacer de extra en una película. “Eso desencadenó todo lo demás y fue el catalizador de una nueva vida. Pero, cuando pisé un set por primera vez, supe que nada me haría sentirme más feliz o realizado”.
La película era “Pacific Rim”, que se rodó en Toronto y que dirigió Guillermo del Toro. Liu lo recuerda: “A partir de ese momento, pensé: 'No sé cómo, pero voy a encontrar la manera de dedicarme a esto.’ Reuní un currículum compuesto por todos los casting a los que me había presentado para hacer videos y películas de estudiantes. Fue suficiente para tener un primer agente y a partir de ahí, empecé a ir a las audiciones”.

Al final, Liu consiguió un papel protagonista en la comedia de televisión canadiense "Kim's Convenience", pero cuando apareció el papel de Shang-Chi, nunca pensó que lo conseguiría. “No sabía que me iban a dar el papel”, dice Liu, “pero me gustó la idea de que alguien pudiera tomar el relevo y representarnos de una forma diferente”.

Pero pasó la primera audición y volvieron a llamarlo. “Después de conocer a Destin, comprendí algo no solo sobre Shang-Chi sino sobre todos los héroes de Marvel”, dice Liu. “Hay un elemento de normalidad en ellos. En el fondo, no todos son dioses griegos de dos metros y medio. Tienen fallas. Son personas corrientes que se ven inmersos en circunstancias extraordinarias y toman decisiones heroicas”.

Liu fue elaborando su personajes en las diferentes llamadas y pensando en una posible prueba de pantalla.

Jonathan Schwartz reconoce que él y el resto de los productores “seguíamos volviendo a lo que escribía Simu mientras veíamos más actores y comprendimos que había algo interesante. Al final, nos lo llevamos en avión a Nueva York en julio de 2019 para una prueba de pantalla junto a Awkwafina, que ya estaba contratada, y Simu dejó boquiabiertos a todos”.

Unos días después, sonó el teléfono de Liu y "de repente mi vida cambió para siempre”. Cuando Liu recibió una llamada de Burbank, California de un número desconocido, supo que era Kevin Feige. “Mi corazón me decía que era él. Cogí el teléfono y escuché su voz”, recuerda Liu. “Su voz es muy reconocible. Kevin dijo: 'Estoy aquí con [la directora de casting] Sarah Finn y con Destin, y queremos decirte algo.’ Después escuché la voz de Destin en el fondo que decía: 'Queremos que seas Shang-Chi.’”

Cuando Liu tuvo por fin la oportunidad de leer el guión, se sintió abrumado. “Destin había hecho un trabajo maravilloso al describirme la historia antes de que la leyera, así que cuando la leí por fin, me eché a llorar”, confiesa Liu. “Existe una relación muy íntima entre Shang-Chi y los personajes y su familia. Me di cuenta de que la película es, por encima de todo, sobre la familia. Lloré porque vemos a un superhéroe asiático haciendo cosas de superhéroe y salvando al mundo. Fue un momento muy importante para mí como fan, como actor y como asiático. Fue absolutamente increíble”.

Después, Simu hizo cuatro meses de pre-entrenamiento físico, luego pasó otro mes en Sídney, Australia, que es donde iba a rodarse la película. A pesar del entrenamiento, Cretton le dijo a Liu que no lo había elegido porque podrían entrenarle en las artes marciales que exigía la cinta.

“Al principio, Simu y yo estuvimos de acuerdo en que lo que permite que el público se conecte con Shaun es por la situación que está atravesando”, dice Cretton. “Simu se tomó en serio el aspecto de lucha del personaje, trabajó incansablemente durante cinco meses, pero también comprendió que no estaba ahí por sus artes marciales sino por lo que había creado para este personaje”.

La importancia que tenía la película para la representación asiática fue fundamental para Liu. “Es el primer superhéroe asiático-americano del Universo Cinematográfico Marvel”, comenta Liu. “Es un hito importante para nosotros. Hemos esperado mucho tiempo para vernos retratados de esta manera en la pantalla. Muchos de nosotros, hijos de emigrantes, nunca nos habíamos visto reflejados en el cine de manera veraz. Habíamos visto caricaturas, estereotipos y en cierto sentido habían eliminado nuestra historia. Me alegra mucho lo que ha sucedido en los dos últimos años y creo que 'Shang-Chi' será una parte importante de ese debate”.

Y añade: “Creo que esta película contribuirá en gran medida a normalizar los rostros asiáticos en el cine fuera de Asia y reconocer que los asiáticos de la diáspora tienen una identidad distintiva que pertenece tanto a Oriente como a Occidente, pero al mismo tiempo a ninguno. Por esa razón, creo que somos pioneros a la hora de dar voz a esos personajes y a sus historias. Me siento muy orgulloso y muy honrado de formar parte de algo tan importante”.


Crear el mundo visual
Para crear el complejo y llamativo universo visual de “Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos”, el trabajo colaborativo fue absolutamente esencial. “He aprendido más en esta película que en cualquier otro proyecto en el que haya trabajado”, dice Destin Daniel Cretton. “Me ha abierto los ojos a las infinitas posibilidades del cine, y la clave fue aprender lo importante que es la auténtica colaboración. Todos nosotros, todos los jefes de departamento, estábamos juntos en un espacio, todos dábamos ideas sobre lo que podría funcionar y lo que deberíamos evitar”.

El supervisor de efectos visuales Christopher Townsend trabajaba al lado de Brad Allan y su equipo de especialistas, que a su vez interactuaban continuamente con la diseñadora de producción Sue Chan, cuyo equipo estaba construyendo los decorados y tenía que asegurarse de que se pudiera trepar y saltar de ellos, sin olvidar a la diseñadora de vestuario Kym Barrett que debía asegurarse que los actores pudieran moverse libremente en sus trajes durante las secuencias de acción.

En lo que respecta al lenguaje visual general, Cretton explica: “Cuando hablé por primera vez con el director de fotografía Bill Pope, le dije que queríamos que la película tuviera un aspecto lo bastante realista para que el público conectara con los personajes. Así que cuando Shang-Chi y Katy están pasando un rato en un bar en San Francisco con sus amigos, no quería que pareciera una película de fantasía. Así que al principio el aspecto de la película es más naturalista, pero aun así debía contener elementos que te prepararan para el viaje loco y salvaje que iba a comenzar”.


Diseño de producción
La diseñadora de producción Sue Chan se incorporó al equipo para dar vida a los diferentes ambientes de “Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos". Sus esfuerzos no pasaron desapercibidos para el director, que comenta: “Desde el principio, Sue Chan lo dio todo en esta película”, dice Cretton. “Cada vez que iba a un set, me sentía transformada. Lo que han hecho ella y su equipo es alucinante. Cuando hablaba con ejecutivos de Marvel que han creado algunas de las películas más importantes del mundo, me decían que se quedaban igualmente alucinados cuando veían sus sets”.

Sue Chan creció viendo películas de Kung Fu en cines chinos del barrio de Chinatown en Nueva York. Sus padres también traían a casa cintas VHS, así que creció con Jackie Chan, Bruce Lee y otras estrellas de las artes marciales.

“No conocía a Shang-Chi antes de la entrevista para el trabajo, pero cuando leí los cómics originales de Marvel, me intrigaron muchísimo”, observa Chan. “Tenía curiosidad por ver cómo manejarían al personaje en esta era moderna y avanzada, sobre todo porque Marvel está interesada no solo en rehabilitar sino en actualizar a los héroes. En la entrevista, hablé sobre mi experiencia como chino-estadounidense y cómo mi perspectiva podría aportar algo a esa nueva visión. Además, es una película de Marvel. ¡Es lo más divertido del mundo para un diseñador!”

Chan vio el trabajo del visionario director chino Zhang Yimou, así como las películas de Ang Lee, y revisó las epopeyas de acción de Hong Kong, observando cómo se rodaban esas películas desde el punto de vista estructural. “Me di cuenta de que si ruedas escenas de Kung Fu y de otras artes marciales, tienes muchos golpes de primer nivel y por esa razón el suelo es muy importante”, continúa diciendo Chan. “Además, debes asegurarte de que el decorado esté construido de tal manera que puedas usar las paredes y las columnas como elementos de atrezzo, así como el mobiliario”.

A Chan le pareció muy interesante crear el complejo de Wenwu porque se adaptaba a los destinos cambiantes y a los estados emocionales de Wenwu a lo largo de la película. “Cuando Wenwu se enamora de Li y forman una familia, ella transforma el patio en un hermoso y exuberante jardín”, dice Chan. “Cuando ella muere, se transforma nuevamente en un ambiente frío e inmaculado donde Wenwu entrena a sus asesinos. Se vuelve militarista”.
Meng'er Zhang recuerda la primera vez que vio el complejo de Wenwu: “Recuerdo la primera vez que entré en el set del complejo de Wenwu que también es el hogar de la infancia de Xialing. Me sorprendieron muchísimo los detalles del set. ¡Quería vivir allí! Todo era real, el estanque, las plantas.
Cuando toqué la pared, sentí como si los recuerdos de mi personaje fluyeran por mis venas”.

La colaboración con otros departamentos fue imperativa para la diseñadora de producción: “Mis directores de arte y escénicos colaboraron estrechamente con el equipo de especialistas y con el equipo de efectos visuales, interviniendo, añadiendo y mejorando algunas cosas cuando era necesario. Cuando los efectos visuales necesitaban cierta textura en un objeto, nuestros escultores intervenían y creaban la textura. También trabajamos estrechamente con los especialistas para asegurarnos de que sus equipos se integraran bien en nuestros grandes escenarios”.

Uno de los mejores ejemplos fue el pueblo imaginado de Ta Lo, que Sue Chan y su equipo construyeron en un parque a unos 30 minutos del centro de Sídney, Australia. Sue Chan lo explica: “Destin quería que el pueblo fuera muy realista, pero también es un pueblo mágico, por lo que tenía que expresar la idea de que no era real pero al mismo tiempo estar poblado por personas reales con inquietudes reales”.

Cretton añade: “Ta Lo existe en un plano inter-dimensional. Es donde se produce el momento cumbre de nuestra película y el escenario donde todas nuestras historias se funden, así que era crucial que fuera impactante”.

Chan alaba el trabajo de “todos los técnicos, artesanos y artistas. Son todos increíbles, porque todo lo que cada persona aportó terminó viéndose en Ta Lo. La diseñadora de producción añade: “Ver cómo tomaba forma fue fantástico. Pedí a todos los miembros de mi equipo que visitaran el set para ver cómo se realizaba su trabajo”.

Cretton sabía que este nivel de detalle era vital para que los actores ofrecieran sus mejores interpretaciones en las escenas culminantes. “Ofrecer a los actores un espacio real donde caminar, verlos coger una herramienta que tal vez nunca veamos en la cámara es increíble. Porque sabemos que alguien hizo una herramienta que solo sirve para cortar escamas de dragón y todos esos detalles influyen muchísimo en el actor y en su interpretación”.

Jonathan Schwartz lo resume así: “Sue supo aportar una magnífica y sorprendente perspectiva a muchos elementos de esta película. La ha hecho parecer real y habitada y eso es muy difícil, sobre todo especialmente para algo que se deriva de algo real que no es necesariamente auténtico sino que es la realidad tal y como existe en el MCU. Y ese es un objetivo difícil de alcanzar. Y Sue lo hizo increíblemente bien”.


Diseño y vestuario
El rigor y la atención al detalle del equipo de diseño de producción fue una dinámica compartida con el departamento de vestuario de Kym Barrett. “Cuando trabajaba con Sue Chan, sentía que hablábamos el mismo idioma”, observa Barrett. “Ambas queríamos teníamos ese deseo de transmitir la verdad. Por ejemplo, en Ta Lo, ¿cómo existían estas personas? Hay objetos y detalles de vestuario que nadie puede ver en la pantalla, pero en los que pensamos. ¿Cómo viven? ¿Cómo comercian? ¿Cómo sobreviven en tiempos de sequía?”
Cretton y Barrett también desarrollaron una visión muy concreta sobre cómo tenía que ser Shang-Chi, que contó con el apoyo total de Kevin Feige y Marvel Studios. “Exploramos cómo se podía percibir y dibujar a este Superhéroe y a las personas que lo rodean”, señala Barrett. “Éramos plenamente conscientes de la necesidad de empoderamiento de las mujeres y de los diferentes grupos culturales. Abordamos todo desde ese punto de vista, explorando dónde las personas encuentran su propio poder”.

“Kym aporta muchas capas a cada uno de sus trajes tanto literal como figurativamente”, dice Cretton. “Piensa profundamente en cada personaje y en cómo su ropa cuenta su historia. Fue emocionante verla interpretar el guión y los personajes y verlos pasar por el increíble proceso de su equipo y ver el resultado final”.

El traje de héroe de Shang-Chi, que se pone en Ta Lo, se creó a partir del vientre de un dragón, con la idea de que cuando el dragón muda su piel, los aldeanos lo recogen y lo guardan porque es muy valioso y resistente. Simu Liu dice: “Fue muy emotivo probarme el traje por primera vez. Comprendí el peso, la trascendencia y el significado y me di cuenta de que hay pocas personas en el mundo que pueden experimentar algo así. Me sentí muy afortunado, un auténtico privilegiado. Fue un momento absolutamente increíble”.

Para los trajes de lucha, a Barrett le interesaba la forma en que un traje puede mejorar el movimiento y apreciar mejor el talento de un intérprete. Todos los elementos de la túnica son cosas que realmente existieron, hasta las ataduras, que se usaban para unir las placas de la armadura a las túnicas de los guerreros”.

Al principio, Barrett le pidió al departamento de especialistas que ensayaran con las túnicas, para asegurarse de que se rompieran en los lugares correctos y que no estuvieran demasiado apretadas para los movimientos que debían hacer los actores. “Una de las partes más agradables de mi trabajo es colaborar con el departamento de especialistas y con los intérpretes”, comenta Barrett. “También fue genial colaborar con los departamentos de efectos visuales y especiales. Chris Townsend y Dan Oliver estuvieron de acuerdo conmigo en hacer todo lo posible delante de la cámara, con efectos físicos y con el vestuario. Los efectos visuales los dejamos para momentos muy especiales o demasiado complicados de resolver”.

El equipo de Barrett en Australia contó con 80 personas trabajando en los diferentes looks de la película. Había gente que cosía, otros que teñían y envejecían las prendas y otros trabajando en el ordenador realizando renderizados e impresiones en 3D. El equipo tenía su propio taller de moldes y un pequeño departamento de accesorios de vestuario. El equipo también contaba con bordadores, zapateros y sombrereros. El 90% de lo que se ve en la película lo realizó el equipo del departamento de vestuario.
Barrett dice que ella y su equipo están muy orgullosos de que "aunque es una 'superproducción' porque es una historia de cómic, si lo miras de cerca, verás motivos maravillosamente detallados en el vestuario que cuentan su propia historia, ya sea subyacente o sutil. Estoy muy orgulloso de la forma en que el guion de Destin y del resto de los guionistas, los mundos que Sue, yo y nuestros equipos creamos, se hayan fundido armoniosamente. Hemos conseguido crear una historia en la que todos nuestros caminos iban en la misma dirección. Hemos creado un todo perfectamente unificado”.

Para el diseñador de maquillaje y peluquería Rick Findlater, contar con un banco de 200 pelucas, con 50 en rotación, fue crucial para los looks de todo el reparto y los numerosos extras. En un momento dado, había hasta 50 estilistas trabajando en los peinados que correspondían a los diferentes lugares representados en la película. Cambiar el peinado para adaptarlo a ciertas escenas de acción era muy importante, sobre todo en lo que se refiere a los arqueros porque, por ley, el pelo debía estar despejado del lado que el arquero utiliza para disparar con el arco y las flechas. En la película, la mayoría de las personas que realizaban escenas de acción llevaban un tipo de peinado que fuera seguro para esa escena en particular.


Efectos especiales y visuales
Como el director Destin Daniel Cretton aún no había dirigido una película con muchos efectos visuales, trabajar con el veterano supervisor de efectos visuales Christopher Townsend fue crucial. A pesar de la experiencia y el talento del equipo de efectos visuales, Townsend animó a Cretton a adoptar el enfoque de que "siempre es mejor intentar hacerlo en directo y de forma real”.

“Si podíamos hacer que el supervisor de efectos especiales Dan Oliver y su increíble equipo lo hicieran de verdad, eso nos permitía mejorarlo con efectos visuales porque eran cosas reales”, dice Cretton. “Permite que el público no desconecte y piense 'eso está hecho por ordenador’. Así que muchos de los efectos que ves en la película los hizo un increíble equipo de especialistas y un fantástico equipo de artistas que hicieron que ese tipo de cosas cobraran vida, literalmente”.

La representación de los Diez Anillos representaba una gran dificultad para el arte visual de Townsend. Townsend afirma: "Como su nombre indica, hay diez anillos que se usan como pulseras. Uno de los grandes retos consistía en que parecieran increíblemente poderosos, porque en la tradición del cómic y en la mitología los anillos tienen muchos poderes. Así que hicimos accesorios físicos que los actores usan en ciertos momentos. Pero en cuanto los anillos se mueven o brillan o salen de sus brazos, ya sea como un látigo o como un proyectil o se disparan, es necesario echar mano de efectos visuales creados en el ordenador. Los artistas han creado esos anillos y los hacen girar para crear resplandores y estelas”.
Para obtener el efecto completo, el equipo de Townsend tuvo que usar puntos en los brazos de los actores que representan cada anillo. “Usamos esos puntos como marcadores de seguimiento”, explica Townsend, “y hay otras cámaras, cámaras testigo, que también se usan y se alinean con la cámara de la película, la cámara principal. Utilizamos esos marcadores y esas otras cámaras testigo para averiguar en qué lugar del espacio está el brazo del actor en cuestión. De esa forma podemos localizar en el ordenador el lugar exacto dónde deben ir esos anillos”.


Artes marciales y entrenamiento
Al igual que “Capitán América: El Soldado de Invierno” de Marvel Studios se inspiraba en películas de género con conspiraciones y suspense, y de la misma manera que “Guardianes de la Galaxia” se inspiraba en las óperas espaciales, “Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos” es un homenaje al cine de artes marciales.

“Basarse en películas de artes marciales nos permitió llevar esta película a un lugar diferente y darle un tono diferente al que ya conocíamos pero que es lo que el público espera y adora de una película de Marvel, pero con una perspectiva totalmente única y nueva que se funde de forma orgánica con el personaje y el mundo”, comenta Schwartz.
Al referirse a las escenas de lucha visualmente impactantes de "Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos", el director Destin Daniel Cretton dice: "Creo que es poco habitual que una película consiga que las escenas de lucha sean hermosas y emotivas, pero así es como son casi todas las escenas de lucha que hay 'Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos.’ No solo son interesantes, también son exquisitas y románticas, o trágicas y emotivas”.

Cada secuencia de pelea no un simple combate, también contiene momentos importantes cargados de emoción que apoyan la historia. Por lo tanto, era necesario contar con una coreografía compleja que se entrelazara con los ritmos emocionales y con el diálogo. Por ejemplo, cuando los futuros padres de Shang-Chi, Wenwu y Li, se encuentran en el bosque, participan en un baile de cortejo y al mismo tiempo evalúan los poderes del otro para el combate.

Como las artes marciales son el núcleo de la película, establecer un enfoque general fue esencial y para el equipo creativo, la autenticidad de las escenas de lucha fue clave desde el principio. “Kevin Feige, los otros productores, Destin y yo nos preguntamos '¿cómo podemos hacer que esta película sea lo más auténtica y original posible?', dice el productor ejecutivo Charles Newirth. “Fue bastante complicado, porque exigía una gran variedad de estilos y técnicas de artes marciales. Realizamos una búsqueda mundial de coordinadores de especialistas, coordinadores de peleas y directores de segunda unidad que ya habían hecho este tipo de películas”.

Cretton y los productores contrataron a Brad Allan como director de la segunda unidad y coordinador de supervisión de las acrobacias. Después, él contrató a expertos coreógrafos de todo el mundo, así como a jinetes y arqueros de élite de Mongolia, y artistas del movimiento y maestros del parkour de Estados Unidos. Australia y Canadá.

“Nuestro objetivo era rendir homenaje a las grandes obras del cine de Kung Fu”, dice el director Cretton. “Esta película no existiría sin ellos. Lo cierto es que todos los miembros del equipo de coreografía compartían un profundo respeto por esta expresión artística. En cada una de estas peleas no solo hay personas que se golpean y se dan patadas. Cada movimiento cuenta una historia y para mí fue tremendamente enriquecedor poder presenciarlas”.

Los actores principales tuvieron que someterse a un entrenamiento intensivo pero los dobles se incorporaban cuando esos pocos meses de entrenamiento no suplían la habilidad que exigía una determinada acrobacia. “Contamos con un fantástico equipo de dobles con 20 o 30 años de experiencia”, dice Newirth. “Brad Allan eligió a esos dobles por los estilos que reflejaban la manera de luchar de cada personaje en particular”.

El equipo creativo realizó una extensa investigación. Su objeto era lograr un equilibrio entre las diferentes artes marciales que retratan a Shang-Chi como un superhéroe de Marvel. Shang-Chi es un arma humana porque su padre le enseñó todas las formas posibles de matar a una persona, así que no tiene un estilo característico. Le enseñaron a 'hacer lo que había que hacer’. Algunos de los estilos que practica Shang-Chi son Hong Quan y Southern Fist, Taiji meditativo y Dragon Style.

Desde el momento en que eligieron a Simu Liu, empezaron a hablar sobre cómo sería su régimen de entrenamiento, tanto desde una perspectiva física como desde la perspectiva de las artes marciales. Cretton señala que para Liu, el entrenamiento físico también fue una gran parte del entrenamiento psicológico del personaje. “Gran parte de la intensidad física del entrenamiento al que se sometió Simu reflejaba el entrenamiento al que se sometió Shang-Chi cuando era niño”, dice el director. “Simu usó ese entrenamiento físico como una herramienta mental para sacarle partido al personaje”.

Simu Liu no sabía gran cosa de artes marciales, solo sabía una cosa. “Cuando tenía 16 años aprendí a hacer backflips. Es todo lo que sabía de artes marciales. “Pero me gustaban las películas de Jackie Chan y Jet Li. Estaba deseando aprender artes marciales. De niño, mis padres no quisieron que aprendiera artes marciales. Les parecía demasiado peligroso y preferían que estudiara piano y matemáticas. Les obedecí, pero siempre quise hacer artes marciales. Y lo mejor de esta película es que he tenido la oportunidad de probar muchos estilos diferentes de artes marciales”.

Y añade: “Aprendí de los mejores del mundo. Pasamos por casi todos los estilos imaginables, desde el Kung Fu chino tradicional, elementos de Wushu y Hong Quan, pero también viajamos al sureste de Asia y exploramos Muay Thai y Silat, Krav Maga y Jiu-Jitsu, y también boxeo y peleas callejeras”.

Sobre el entrenamiento de Simu Liu, el coordinador de lucha Andy Cheng comenta: “Simu es un talento joven. Tiene mucha energía. Puede hacer algunos trucos y es realmente bueno. Puede hacer sus propias acrobacias. Nos ayuda porque, físicamente, es muy bueno para este papel”.
Además de que cada personaje tiene su propio estilo, cada secuencia de lucha de la película es única. La pelea en el autobús es una de las primeras secuencias de acción de la película, que comienza como un día supuestamente normal con Shaun y Katy de camino al trabajo en un autobús de San Francisco.

Al describir la escena, Liu dice: “Shaun se da cuenta de que algo anda mal. Una pequeña pandilla se le acerca y le pide su colgante. Él siente mucho cariño por ese colgante porque es una de las pocas cosas que tiene de su madre. Y no está dispuesto a rendirse. Y así es como cambian las tornas”.

Shaun no tiene más remedio que volver a convertirse en Shang-Chi, y la pelea continúa... para sorpresa y horror de Katy.

Para crear esa enorme pelea, los realizadores estudiaron el autobús, descubriendo formas de usar cada centímetro. En el espacio reducido del autobús, Shaun tiene que usar todos los movimientos que aprendió como Shang-Chi para conservar su colgante, así como salir vivo. El equipo de lucha utilizó diferentes estilos en esa escena, sobre todo porque es la primera vez que el público ve pelear a Shang-Chi.

Los realizadores querían que la pelea entre Shang-Chi y Xialing en su club de las Dagas Doradas se pareciera a una discusión entre hermanos y discurre mediante una compleja e impresionante pelea física. La idea de la pelea era que fuera brutal pero, en palabras del director Cretton, "que también fuera la pelea de dos hermanos ajustando cuentas”.

Lo explica así: “Tengo tres hermanas y dos hermanos, así que sé lo que se siente en esas peleas tan emocionales. Sabes que no corres peligro seguro porque debajo de toda la frustración hay un amor que es mucho más profundo que cualquier problema que tengas con alguno de tus hermanos en ese momento”.

Esa pelea representaba una mezcla diferente, como explica Cheng, “En esa secuencia, pelean como una pelea de UFC, así que terminamos mezclando artes marciales de Kung Fu. Pero no queríamos alejarnos de la realidad, así que mezclamos el estilo de lucha de la MMA”.
Meng'er Zhang, en el papel de Xialing, entrenó en Sídney y recuerda que fue bastante duro: “El equipo me preguntó si había practicado artes marciales. Aprendí combate escénico en el Shakespeare's Globe de Londres, así que dije que sabía algo, pero cuando empezamos el entrenamiento les dije: '¡Lo siento, no sé nada sobre artes marciales!’”

Tony Leung no es ajeno al Kung Fu, ya que lo aprendió para sus papeles en el cine. En lo que se refiere a esta película, Leung dice: “Trabajé con el Tiger Claw, un estilo simbólico, un símbolo de Oriente y que simboliza el estado de ánimo del personaje. Representa la agresividad y la ira de Wenwu”.

Andy Cheng añade: “Recuerdo cuando Tony Leung llegó por primera vez al plató. Estábamos entrenando y aprendió el Hung Ga. Era muy bueno. Asimila muy bien la coreografía, así que aprende muy rápido. Gracias a su dilatada carrera, todo esto le resulta más fácil. Lo ve un par de veces y lo recuerda de inmediato. Hizo 'The Grandmaster' con Wing Chun, aunque esta película es diferente. Pero él es un magnífico actor. Es capaz de hacerlo todo”.
La pelea de Shang-Chi con su tía, Ying Nan, interpretada por Michelle Yeoh, tenía su propia personalidad, influenciada por el estilo de la madre de Shang-Chi, y que se basa en el Tai Chi. Yeoh había practicado varias formas de artes marciales para sus películas anteriores, pero enseguida se dio cuenta de que esta tenía un enfoque singular.

“La esencia de Ta Lo te da todas las claves”, observa Yeoh. “Cuando practicas Qi, puedes controlar la energía que hay dentro de ti y trabajar con la energía de la naturaleza que te rodea. Ying Nan y ella hermana dominaban esta técnica. Me desvío en vez de atacar; si me pisas, atraeré esa energía para alejar ese pie. Contamos con coordinadores de especialistas increíbles como Brad Allan, Mark Ginther, Peng Zhang y Andy Cheng; todos aportaron sus diferentes visiones y estilos”.

“Ver a Michelle Yeoh patearle el trasero a Simu fue muy divertido”, añade Cretton. “Colocarla en el ring con Simu fue una de las peleas más divertidas de la película porque ambos son muy descarados. Cada vez que le daba leña, le dedicaba una pequeña sonrisa que decía 'no puedes conmigo.’”

Florian Munteanu, que encarna a Razor Fist, señala: “Mi experiencia es el boxeo, así que me ayudó cuando tenía que aprenderme escenas de acrobacias y peleas. Tengo un buen coeficiente intelectual a la hora de conocer la distancia, de saber cómo moverme a la derecha y luego a la izquierda. Así que el boxeo ocupaba gran parte de mi rutina de ejercicios. Además tenía que parecer lo más enorme posible, ¡así que comía mucho más de lo que normalmente como para convertirme en un tipo realmente intimidante!”

El humor era vital en los momentos clave de las secuencias de peleas, y sucedió de forma natural, sobre todo gracias al reparto. “Cuando cuentas con actores como Simu y Awkwafina en una secuencia de acción, sabes que habrá notas de humor por todas partes”, observa Cretton. “El humor dentro de una escena de acción la hace aún más atractiva”.

Una vez que se montaron las escenas, Cretton se dio cuenta de que “cada una de nuestras secuencias de lucha y acción son únicas y hacen evolucionar a nuestros personajes de forma que aprenden algo los unos de los otros o encuentran motivos para enfrentarse entre ellos. Es algo que nunca había hecho antes, pero fue emocionante filmarlo y verlo en la pantalla”.

El entrenamiento en el uso de armas complementaba el entrenamiento de artes marciales. Se utilizan muchas armas en la película, incluidos bastones de bo, arcos y flechas de tiro con arco, espadas como la espada de gancho, dardos de cuerda, cuchillos y lanzas.

El coordinador de especialistas Mark Ginther explica el entrenamiento de los arqueros: “Trajimos a un especialista que entrenó a Awkwafina durante unas tres semanas. En cuanto tenía tiempo, venía y disparaba con él para aprender las técnicas correctas para el tipo de arco que debía usar. También entrenó al resto de los intérpretes y actores que debían usar los arcos”.

La formación para conducir también estaba en el menú de Awkwafina, ya que su personaje conduce peligrosamente en varias localizaciones a lo largo de la película. Así que el equipo de especialistas enseño ciertas técnicas a Awkwafina para familiarizarla con las maniobras que se realizarían en la secuencia real. Para simularlo, usaron una pantalla azul en una plataforma de cardán. Awkwafina no sabía conducir con cambio manual, así que el equipo de especialistas le enseñó lo que hay que hacer para derrapar, hacer ochos y giros marcha atrás, y todos los movimientos de la mano que necesitaría hacer para que parecieran de verdad.

Para Awkwafina, la formación para conducir fue una experiencia estimulante. “Me sentí como si estuviera en 'Tokyo Race (A todo gas 3)'”, se ríe. “Pisaba el acelerador a fondo y hacía vueltas de campana. Ha sido maravilloso. Lo hicimos en la pista de carreras de Sídney. Fue genial. Increíblemente divertido”.

El coordinador de luchas Andy Cheng lo resume: “No queríamos basar el estilo de lucha en un solo tipo. Queríamos basarlo en el personaje y en la situación. Es la forma de que 'Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos' sea diferente. La gente sabrá por qué a Shang-Chi se le llama el Maestro de Kung Fu. El público va a ver casi todos los tipos de Kung Fu que puedan imaginar”.


¡Bienvenido, Shang-Chi!
El 3 de septiembre, en una historia de origen más rompedora que ninguna otra, un nuevo Superhéroe encontrará oficialmente su sitio en el Universo Cinematográfico Marvel. El viaje de autodescubrimiento de Shang-Chi llevará al público a experimentar un emocionante viaje repleto de acción nunca vista con nuevos y maravillosos personajes, mundos deslumbrantes, y todo con el estilo característico de los Estudios Marvel.

Para el productor Jonathan Schwartz, el nuevo superhéroe del MCU anticipa muchas promesas para el futuro. “Shang-Chi tiene un futuro muy brillante en el Universo Cinematográfico Marvel", dice Schwartz. “Shang-Chi viene con sus propios poderes. Con su perspectiva. Con su talento y con su carisma. Así que ojalá nos esperen años con súper equipos y cruces en los que Shang-Chi demuestre su capacidad para interactuar con otros personajes en todos los ámbitos”.

Simu Liu está entusiasmado con lo que le espera al público y dice: "Hay secuencias y momentos que nunca se han visto en una película de Marvel. El público va a alucinar. Van a vivir momentos electrizantes que les van a dejar boquiabiertos. Tendrán que verlo para creerlo. Hay secuencias absolutamente increíbles y creativas que han salido de las mentes privilegiadas de nuestros diseñadores. Va a poner muy alto el listón y no solo en lo que se refiere a las películas de Marvel, sino también al cine en general”.

Destin Daniel Cretton lo resume comentando un aspecto de la película que es muy importante para él y para todos el equipo de producción. “Estoy muy orgulloso de que esta película nos haya permitido reflejar una mayor diversidad de rostros tanto delante como detrás de la cámara”, dice el director. “Creo que el mundo está hambriento de películas que reflejen quiénes somos con todas nuestras diferencias”.