Satánica

Satánica es el cuarto adelanto de Furor (2018), un álbum de Varry Brava.

Con un sonido "muy ochentero y melodías sentimentales que le aportan ese punto italiano romántico", explica el grupo. "Es probablemente la canción más pasional y descarnada de Furor", apuntan.

"Satánica es un juego peligroso, una relación que atrapa, domina, da placer y hace daño al mismo tiempo. Satánica pide clemencia, perturba, esclaviza, engancha y no te deja escapar. Cuando algo está en ese punto solo puedes pensar que todo es brujería y magia negra; un hechizo", señalan.

"Fue la primera canción en la que empezamos a trabajar -cuentan-. Raúl de Lara (productor) consultó su bola de cristal y lo vio muy claro, Satánica tenía que ser elegante, hipnótica y muy personal. Una canción especial. Lo consiguió".

Lanzamiento y estreno del vídeo con letra el 2 de febrero de 2018.


Versión con Alberto Jiménez
El 28 de septiembre de 2018 se estrena el vídeo de una versión especial en directo, con la colaboración de Alberto Jiménez de Miss Caffeina. A los teclados, bajo y batería presentes en la canción original, se unen una sección de cuerdas formada por violín, viola y contrabajo. "La idea de grabar 'Satánica' en una iglesia salió una noche después de un concierto", explica Varry Brava. "Primero imaginamos 'Satánica' a piano y voz, luego pensamos que sería más intenso y más especial hacer una versión con toda la banda incluyendo una sección de cuerdas". "Montar todo esto es siempre más bonito si lo compartes y pensamos en Alberto. Nos gusta mucho su sensibilidad al cantar y era muy fácil imaginar su voz en Satánica. Le contamos la idea y le encantó, nos reíamos repasando esa atmósfera del clip de 'Like a prayer' de Madonna, somos muy fans. A los pocos días nos envió sus voces para que pudiéramos escuchar como tenía pensado cantarla, las armonizaciones eran preciosas y con un gustazo espectacular. Era perfecto y justo así lo grabamos luego en directo".

El convento de la Inmaculada Concepción en Alfaro (La Rioja) es el escenario elegido para la grabación del vídeo (realizado por AfterliVe Films), con sonido en directo. "Fue complicado encontrar una iglesia que nos dejara grabar, pero AfterliVe consiguió lo imposible y nos fuimos a un convento espectacular del siglo XVII en el centro de Alfaro en La Rioja. Nunca nos hubiéramos imaginado tocando en una iglesia. La acústica del sonido ponía los pelos de punta. Todos sentíamos la espiritualidad del lugar. Ha sido una experiencia brutal", recuerda el grupo.